El escándalo no para y cada vez suma nuevos capítulos. Y es que la interna en la familia de Alberto Cormillot sigue al rojo vivo, y esta vez fue Estefanía Pasquini quien rompió en llanto en diálogo con Desayuno Americano, el programa que se emite en América TV.
Allí, decidió contar todo lo que le habría hecho Reneé Cormillot, la hija mayor de su marido. «Cómo llegamos a este quilombo.. ¿Qué pasó? SI vos querías resolver algo, porque empiezo a leer cosas que son mentiras. Eso de decir que cuando estaba su mamá estaban todos unidos, como que yo vine a desunir. Yo no hice nada. Yo aliento a que comamos todos juntos… hay mucho atrás», aseveró.
«Cuando veo estas cosas me pregunto cómo terminamos en esto. Son de toda la vida estos cruces. Que diga que yo no le avisé de una operación que estaba programada… ella sabía. Me callo porque no quiero armar quilombo, protegerla. ¿Pero hasta qué momento? Yo tengo una cantidad de cosas… ella se ha peleado con una amiga porque nos mandó los chats que tenía de cómo nos trataba al padre y a mí. Hay muchas cosas que uno deja pasar», apuntó Estefanía Pasquini.
«Me hizo bullying, tengo cargadas… parece una obsesión que tiene conmigo. Cosas que no puedo decir porque son demasiado desagradables. Dijo que estaba obsesionada con la plata, cuando Alberto me dijo que tenía que firmar eso para tranquilidad de los chicos… O sea, necesitás que tu papá esté con una mujer y tu tranquilidad es que no se vaya a llevar nada tuyo. No tienen economías separadas, se le puso las cosas a su nombre para que se quede tranquila. Alberto es el único que sabe lo que yo banco y callo», lanzó.
Fue allí cuando Paulo Vilouta, al frente de Desayuno Americano, presentó la segunda parte de la nota, donde rompió en llanto. «En una parte de la charla se descompensó totalmente», apuntó el comunicador. «La verdad es que hoy me dolió mucho cuando escuché esto de que Reneé se quedó mal por lo de las internaciones y demás. A mí nunca me vino a decir lo que le pasaba. Yo no me entero nunca de nada por boca de ella. Si ya empezamos a jugar este juego así… no tengo ganas», afirmó la nutricionista.
«A mí me decís las cosas de frente y si te molestó algo lo cambio y listo. Me dolió escucharlo. Prefiero mantenerme un poco al costado. Cada uno sabe por qué decide contar o no… Ellos no son chiquitos, el padre no estaba internado que no podía hablar ni nada, si le pegaba un llamado listo. Hay cosas para mí que se resuelven muy fácil. No sé, está pirando para cualquier lado y ya no me gusta. No me gusta el lío a mí. No me siento cómoda en este rol», sentenció Estefanía Pasquini.
