La segunda fecha del Torneo Clausura encuentra a River con la mira puesta en Instituto, en Córdoba, pero el mercado de pases no se detiene. Mientras Marcelo Gallardo prepara el equipo para seguir sumando de a tres, en las oficinas del club se reactivó una operación que parecía estancada: la llegada del chileno Lucas Cepeda, una joven promesa que seduce por su talento, versatilidad y proyección internacional. Todo esto, gracias a un nombre que nadie esperaba: Federico Bernardeschi.
Desde el inicio del libro de pases, en Núñez sabían que no iba a ser sencillo fichar a Cepeda, extremo zurdo de 22 años que brilla en Colo Colo y en su selección nacional. Con la capacidad de moverse por ambas bandas, colaborar en defensa como carrilero e incluso desempeñarse como lateral, su polifuncionalidad enamoró al cuerpo técnico. Por eso River presentó una oferta cercana a cinco millones de dólares por el 70% del pase, cifra que fue aceptada por el club chileno.
El obstáculo europeo: Bologna y el “no” de Cepeda
Todo parecía encaminarse, pero fue el propio Cepeda quien frenó la operación. Tentado por la posibilidad de cruzar el Atlántico, le dio prioridad a una propuesta del Bologna, que lo tenía en carpeta como una de sus principales incorporaciones. Así, la ilusión de verlo en el Monumental se desvanecía. Pero el fútbol da vueltas impensadas, y una noticia desde Italia reabrió la puerta que parecía cerrada.
El periodista Nicoló Schira confirmó que el Bologna desistió finalmente de sumar a Cepeda tras cerrar la llegada de Federico Bernardeschi, quien ya se encuentra realizando la revisión médica para firmar un contrato hasta 2027, con opción de extenderlo hasta 2028. Esa incorporación desplazó al chileno, dejándolo sin la chance europea que tanto anhelaba.
River otra vez en carrera
Con Torino como otro interesado que decidió no avanzar, las posibilidades para Cepeda se redujeron notablemente. Y así, el Millonario vuelve a escena con una ventaja importante: ya tenía un acuerdo cerrado con Colo Colo. De hecho, solo faltaba el «sí» del jugador para estampar la firma. Hoy, con el obstáculo italiano eliminado, esa firma podría estar más cerca que nunca.
Otro punto que favorece a River es la situación actual del futbolista en Chile. Sancionado por un acto de indisciplina, su presente en el club albo es inestable, y una salida parece lo más conveniente para todas las partes. Así, en un contexto que parecía adverso, el club de Núñez se reposiciona con fuerza para quedarse con un refuerzo de jerarquía internacional.
Una chance que no se puede dejar pasar
Si bien aún no hay confirmación oficial, la operación podría concretarse en cuestión de días si Cepeda acepta vestir la camiseta de River. La dirigencia, que nunca descartó del todo la posibilidad, ve ahora el momento justo para cerrar una incorporación que elevaría el nivel ofensivo del plantel. Con el torneo local en marcha y la Copa Libertadores en el horizonte, sumar un futbolista con la proyección del chileno podría ser un golpe de efecto clave.
Mientras la pelota rueda en Córdoba, los teléfonos arden en Buenos Aires. Todo dependerá de la decisión final del jugador, pero River sabe que tiene la ventaja, el terreno ganado y una oportunidad de oro que no quiere dejar escapar. Porque a veces, en el fútbol, la jugada más inesperada es la que termina definiendo el partido.
