La invasión de Rusia a Ucrania disparó los precios del GNL un 29%, y se espera que siga subiendo en los próximos días. A raíz de esto, Argentina podría destinar, en 2022, al menos el triple de lo que gastó el año pasado para la importación de gas natural licuado tras el alza del precio. Esto vuelve a complicar las posibilidades de cumplir con los puntos del FMI y de reducir el déficit fiscal.
El mayor gasto en energía podría golpear las finanzas del Gobierno de Alberto Fernández, sobre todo a las obligaciones de reducir los subsidios energéticos para achicar el gasto público y aumentar las reservas internacionales del Banco Central (BCRA). La empresa Integración Energética S.A. (IEASA, ex Enarsa) es la encargada de comprar el GNL; a fines de febrero y principios de marzo, comenzará la licitación para la compra de cargamentos para cubrir la primera mitad del año.
Acorde a NA, en 2021, Argentina importó GNL por 1.095 millones de dólares a un valor promedio de 8 dólares por millón de BTU para satisfacer las necesidades de gas de industrias y hogares. Este año se espera que las importaciones totalicen entre 3.000 y 3.500 millones de dólares. Sin embargo, en diciembre los precios se dispararon a 60 dólares por millón de BTU por las tensiones entre Rusia y las naciones que conforman la Unión Europea.
«Se habla de más de 3.000 millones de dólares de importación de GNL con el precio de 24 dólares, ahora ya está en casi 40 dólares», explicó Daniel Dreizzen, analista de la consultora Ecolatina y exsecretario de planificación energética. En las últimas horas, esos datos quedaron desactualizados al tocar los 46 dólares por lo que se podría complicar el abastecimiento de gas en invierno. «No creo que validen (en el Gobierno) un precio de más de 30 dólares; si no lo validan, puede haber cortes«, agregó.
Con este nivel de incertidumbre, en los mercados gana terreno la perspectiva de una mayor demanda de LNG en los próximos meses. Aunque Rusia no disminuyó la distribución de gas natural a Europa y desde el continente aseguran que habrá un buen abastecimiento. Pese a eso, los precios allí están reaccionando, y Estados Unidos anunció que, de reducirse la importación, hará uso de sus reservas para abastecer a la población.
Mientras tanto, Argentina avanza con la construcción del Gasoducto Néstor Kirchner, el cual permitirá avanzar con la producción de gas en el país y transportar el recurso hacia varias regiones. De esta manera, se espera que la puesta en marcha de la obra permita paliar las consecuencias económicas del enfrentamiento bélico, que hasta ahora ha provocado, al menos, 137 muertos en Ucrania.