Con la renuncia de Máximo Kirchner a la presidencia del bloque de diputados nacionales del Frente de Todos, se agudizó la interna en la coalición oficialista. La grieta es principalmente entre el bando kirchnerista y el albertista. Lo curioso es que hasta no hace mucho tiempo, el propio presidente Alberto Fernández se jactaba de la “unidad” frentetodista y negaba las disputas internas.
“Grábense esta foto. Es la foto de nuestra unidad. No habrá ni tapa de diarios ni sentencia judicial que nos lleve a dejar de hacer aquello que debemos hacer en favor de argentinos”, dijo Fernández el 5 de mayo último durante un acto en la localidad bonaerense de Ensenada junto a la vicepresidenta Cristina Kirchner, el titular de la Cámara de Diputados, Sergio Massa, y el gobernador anfitrión, Axel Kicillof.
Antes de anunciar la construcción de 55.000 viviendas abandonadas en 2016 –según consta en un comunicado de la Casa Rosada–, el motivo de la cita oficial, Fernández optó por destacar la “unidad” del Frente de Todos ya que ese día tanto el jefe de Estado como la vicepresidenta volvieron a mostrarse juntos en público después de varias semanas, tras rumores sobre una crisis interna luego de la frustrada salida del subsecretario de Energía Eléctrica, el kirchnerista Federico Basualdo, que el ministro de Economía, Martín Guzmán, no pudo rubricar.
“Miren bien, aquí veo muchas cámaras de fotos, de televisión, yo les pido por favor que saquen esta foto, y no se olviden nunca, porque aquí estamos los que estamos convencidos de lo que hay que hacer en la Argentina, y no va a haber ni tapa de los diarios, ni sentencia judicial, que nos deje o nos lleve hacer aquello que debemos hacer en favor de los argentinos”, señaló el jefe de la Nación.
Con un tono confrontativo y con el famoso dedo índice apuntando a los presentes, remarcó: “Grábense esta foto, esta es la foto de nuestra unidad, de los que queremos poner de pie a la Argentina, después de un tiempo en que la derrumbaron, la pusieron de rodillas, la endeudaron, le quitaron la educación y la salud. Y nadie, nadie, nadie, va a hacernos ceder en eso”.
En paralelo, se sumaba el fallo de la Corte Suprema de Justicia a favor de la Ciudad de Buenos Aires por el tema clases presenciales en medio de la segunda ola de coronavirus. Fue en esa línea que el mandatario dijo: “Basta, paremos, ya han hecho mucho daño. El Estado de derecho necesita de una institucionalidad adecuada. Vuelvo a repetirles: elijan al candidato a presidente que quieran, pero no usen las sentencias para favorecerlos”, sentenció.
Respecto de la foto de unidad mostrada ese mediodía, la confluencia de Alberto Fernández y Cristina Kirchner en un mismo escenario no se producía desde marzo del año pasado, cuando compartieron un acto en la ex ESMA con motivo del aniversario del golpe cívico-militar de 1976. En Ensenada, la famosa foto se dio además con el ministro de Desarrollo Territorial y Hábitat, Jorge Ferraresi; la vicegobernadora bonaerense, Verónica Magario; y el jefe comunal de Ensenada, Mario Secco.