Con una inflación que en febrero fue del 4,7% y que se estima que para fin de año alcanzará el 60%, la gran pregunta es de qué manera se puede ahorrar en la Argentina y aquí viene otro interrogante, es mejor colocar el dinero en un plazo fijo tradicional o en un UVA. En ese marco, la periodista especializada en economía, Lara López Calvo, puso el foco en el «interés compuesto».
Esta mañana en el ciclo Buenos Días América, que conduce Antonio Laje, la comunicadora recalcó que «los mayores financieros del mundo dicen que el interés compuesto es uno de los principales conceptos de educación financiera que hay que conocer» e indicó que se trata «del interés del interés», es decir, «lograr invertir esos intereses que vas ganando para que crezca tu capital inicial», precisó.
A modo de ejemplo, detalló que «si una persona, que tiene educación financiera, pone 10.000 pesos por 10 años, va a lograr tener al final de esos 10 años, $576.640. En cambio alguien sin ese tipo de conocimiento, a fin de esos 10 años, va a tener $60.000 porque, a diferencia del primer caso, acá el individuo retiró los intereses» y en consecuencia, hizo hincapié en «la brecha que hay entre ambos ahorros».
Acerca de cómo hacer para obtener los beneficios del interés compuesto, la profesional señaló que «en un primer mes, ponés $10.000 en tu plazo fijo» y aclaró que «ese es tu capital y nunca vas a poner más que ese capital que pusiste». «Si la tasa es del 50% anual, en el primer mes vas a tener $5.000 y a fin de año, $15.000», puntualizó.
«En el segundo año, ya lo que ponés son $15.000 y la tasa sobre $15.000 te da 7.500 pesos de intereses y para fin de ese año, $22.500», precisó y añadió que «esto también se puede hacer mensual y se hace con el plazo fijo tradicional, que es a 30 días y así vos vas sumando los intereses que tenés cada mes». En ese punto, aseguró que «siempre va a dar mucho más dinero, el plazo fijo en el que se van sumando los intereses».
«Por eso, cuando se habla de tasa fija efectiva anual, que eso está tanto en los créditos como en los plazos fijos, es la tasa que la persona gana gracias al interés compuesto», explicó y detalló que «se van sumando los intereses de cada mes y es así, como va creciendo el capital». Por lo tanto, «si se tiene un plazo fijo, hay que renovarlo, pero nunca por un plazo largo», marcó y agregó que «la magia del interés compuesto es que siempre se da sobre ese interés que vos le vas sumando, o sea, siempre ocurre sobre una mayor cantidad».
¿Plazo fijo tradicional o UVA?: con cuál de los dos se gana más
En este contexto, Lara indicó que «aquí siempre viene una duda que es si conviene el plazo fijo tradicional, en el que cada 30 días se pueden sumar los intereses o el plazo fijo UVA, que cubre a la persona de la inflación, pero es cada 90 días» y respondió que «la clave está en la fórmula que se compone del interés anual, que ahora es 3,5% dividido los días del año (365) multiplicado por la cantidad de días que colocás el dinero, 30 si es un plazo fijo tradicional».
«Solo haciendo esa cuenta, la persona puede calcular cuánto va a tener a fin de año con interés compuesto», afirmó y agregó que «lo que le de, lo multiplica por la plata que puso, por lo que quiera hacer su plazo fijo». Es así, como el individuo «va a saber cuánta plata tiene a fin de mes con el plazo fijo tradicional», subrayó.
Para concluir, aseveró que «en este momento de la economía, más allá de la magia del interés compuesto, conviene el plazo fijo UVA porque te cubre contra la inflación», que advirtió que «está avanzando muy rápido, mucho más rápido que lo que avanza la tasa de interés» aunque el «plazo fijo tradicional tenga más capitalización», aclaró. Como ejemplo, puntualizó que si «una persona pone $50.000 a un año, en el plazo fijo tradicional con interés compuesto, va a tener $76.150 a fin de año y con el plazo fijo UVA, $78.000».