En el marco de la guerra entre Ucrania y Rusia que ocasionó el exilio de millones de personas, el Gobierno autorizó “el ingreso y la permanencia por razones humanitarias” a la Argentina a ciudadanos ucranianos y sus familiares directos, independientemente de su nacionalidad. Hasta el momento, más de 1,5 millones de hombres, mujeres y niños debieron abandonar su hogar por el conflicto bélico.
La medida fue anunciada por la Dirección Nacional de Migraciones (DNM), dependiente del Ministerio del Interior de la Nación, otorga el “estatus de protección temporal para garantizar el ingreso y permanencia en el país de ucranianos y familiares directos”. El plazo de permanencia en nuestro país es de hasta 3 años y, al vencerse, los ciudadanos podrían solicitar la residencia definitiva.
Además, las personas beneficiadas estarán eximidas del pago de las tasas migratorias por “encuadrar su situación en el estado de vulnerabilidad” y “encontrándose reunidas asimismo las razones humanitarias requeridas”. Según explicaron desde la Casa Rosada, la medida adoptada “se enmarca en las políticas de protección de los derechos humanos que lleva adelante Argentina y apunta a facilitar y garantizar la reunificación familiar de los ciudadanos ucranianos”.
De acuerdo a datos oficiales de la Organización de las Naciones Unidas, hasta el momento se registró la salida de más de 1,5 millones de personas que huyen de la guerra, el mayor éxodo desde la Segunda Guerra Mundial. A su vez, anticiparon que la cifra de ciudadanos que abandonan Ucrania podría llegar hasta los 10 millones, lo que supone casi un 25% de su población de 44 millones, según informó la agencia Reuters.
Ley de Migraciones
De acuerdo a los argumentos de la Casa Rosa, el visado otorgado a los ucranianos se enmarca en el artículo 23 inciso M de la Ley de Migraciones 25.871. Este artículo considera “residentes temporarios por razones humanitarias” a todos los que ingresen a suelo argentino con razones que justifiquen, a juicio de la Dirección Nacional de Migraciones, un tratamiento especial.
De este modo, se busca “brindar protección a aquellas personas que, no siendo refugiadas o asiladas, momentáneamente no pueden permanecer o retornar a su país”. El último fin de semana la comunidad ucraniana en Argentina impulsó una protesta por los escollos económicos que le planteaba el Gobierno para traer a sus familiares al país.
Denunciaron que el Ejecutivo cobra impuesto al turismo y encarece mucho el vuelo de los ciudadanos de Ucrania que quieren huir de la invasión de Vladimir Putin. «Hoy para traer a nuestra familia ucraniana tenemos que pagar un impuesto a quien viaja al exterior. Un viaje a Polonia cuesta 500 dólares y termina siendo 1000 con los impuestos», replicó el hombre indignado.
«Parece que en Argentina no se dan cuenta que no vienen de turismo, no están paseando. Nadie está pidiendo un subsidio o mantenerlos, pero no pagar impuesto al turismo«, sentenció uno de los presentes. Al parecer, el reclamo llegó a Balcarce 50 y se hizo efectivo.
Argentinos en Ucrania
De acuerdo a los registros oficiales de Cancillería hasta este lunes 82 argentinos habían podido salir de Ucrania hacia diferentes países. Además, precisaron que también pudieron abandonar el país azotado por el conflicto bélico 26 extranjeros familiares de estos connacionales. Por lo tanto, explicaron, desde el fin de semana no quedan argentinos en territorio ucraniano.