Este lunes, la Organización Mundial de la Salud (OMS) confirmó siete ataques contra la red de salud en Ucrania desde el inicio de la invasión rusa el pasado 24 de febrero, frente a las cuatro incursiones reportadas hasta el día domingo.
«Hasta el 7 de marzo, se han publicado nueve incidentes verificados de ataques a la atención sanitaria en Ucrania en el Sistema de Supervisión de Ataques a la Atención Sanitaria, siete con nivel de certeza ‘confirmado’ y dos con nivel de certeza ‘posible’», dijo un funcionario de la OMS, en referencia a su base de datos.
El director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, afirmó en Twitter que habían ocurrido «varios» ataques, sin dar detalles, agregando que se trató de una violación del derecho internacional humanitario. El funcionario no dio información sobre los autores, ya que el sistema no tiene la autoridad para recabar información sobre ellos.
En seis de los siete ataques confirmados, se utilizaron armamento pesado. En uno fueron empleadas armas individuales, tales como granadas o artefactos improvisados, contra una ambulancia el 26 de febrero. Hasta el momento, fallecieron seis personas y doce han resultado heridas.
«Ellas (las instalaciones sanitarias) están protegidas por el derecho internacional humanitario, pero está ocurriendo otra vez», dijo Francesco Rocca, presidente de la Federación Internacional de Sociedades de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja, a los medios el lunes. «Es muy triste», agregó.
Por otro lado, la oficina de derechos humanos de la ONU confirmó que han fallecido 406 civiles, incluidos 27 niños, desde el 24 de febrero. Aun indicaron que la cifra real probablemente es mucho mayor. Más de 1,5 millones de ucranianos han huido del país hacía otros países, como Alemania y Polonia.
