El senador de Juntos por el Cambio, Luis Juez, habló sobre el acuerdo con el FMI y su rol como funcionario para decidir sobre él. Si bien apuntó contra Máximo Kirchner por votar en contra, confesó sentirse “avergonzado” por estar a favor del proyecto del kirchnerismo. Alberto Fernández y Martín Guzmán son sus principales creadores, aunque 40 diputados de su bloque se opusieron a él.
“Estoy avergonzado de acompañar el proyecto de Alberto Fernández. Jamás pensé que mi primer voto en el Senado iba a ser apoyar una ley del presidente. Pero lo hago por Argentina”, admitió en diálogo con CNN Radio. Agregó que votará a favor porque “no podemos esperar a que el país explote para que le vaya mal a Alberto Fernández”. En este sentido, dijo que “sería irresponsable dejarle un país en default a un presidente tan débil”.
La Cámpora según Luis Juez
La grieta interna en el Frente de Todos, con el antecedente de la derrota en las PASO, pone en jaque la estabilidad del jefe de Estado. La Cámpora, partido que responde a Cristina Fernández de Kirchner, ha sido firme en no acompañar la decisión de aprobar el programa del Fondo. “Tengo claro que este tipo tiene una debilidad manifiesta, y si nosotros hacemos algo para terminar de empujarlo, sabemos dónde termina este país”, expresó.
«Yo no puse a Martín Guzmán o a Alberto Fernández. Los pusieron desde La Cámpora, y ahora quieren guardar las banderas, como el equipo que se va cuando no pelea el campeonato. Ahora resulta que nosotros nos tenemos que cargar a Alberto al hombro», añadió. El Frente de Todos tuvo que admitir las modificaciones en dos artículos del proyecto para que Juntos por el Cambio lo aprobara.
¿Qué pasará en el Senado?
Luis Juez adelantó qué pasará cuando el acuerdo pase al Senado. «Yo lo que puedo adelantar, sin haber hecho la reunión de bloque, es que nuestra conducta en el Senado será republicana, cuidadosa de las instituciones. No vas a encontrar una actitud cobarde como la de Máximo y la Cámpora. No nos vamos a esconder«, destacó. Máximo Kirchner, expresidente del bloque de Diputados del Frente de Todos, dejó su banca vacía.
Sin embargo, también tuvo en consideración el rol que podría tener Cristina Fernández de Kirchner cuando se realice el debate. «La única sorpresa que puede haber es que Cristina se quede todo el debate, porque por lo general después de la apertura se va. Debería estar, para eso le pagamos el sueldo. Tengo algunas frasecitas para dedicarle. Me encantaría decirle que nosotros sostenemos a Alberto, el presidente más débil desde la vuelta de la democracia. Hoy se sostiene porque nosotros creemos más en la república que el partido que lo puso en el poder».
Silencio de la coalición ante los disturbios
Con respecto a los disturbios que hubo fuera del Congreso, el senador repudió el ataque al despacho de la vicepresidenta, pero también agregó comentarios sobre los policías heridos. También criticó el tweet del ministro de Desarrollo bonaerense, Andrés Larroque. «Deberían decirle a Larroque que aturde el silencio en repudio al atentado al Parlamento, a la quema de Policías, a demás. Cristina no es la dueña del Senado, aturde el silencio de como estos tipos promueven quilombo, se hacen los tontos y después no dicen nada. Dejen de mirarse el pupo, no es Cristina la que tuvo un problema: es el país y las instituciones. Siempre están hablando de ellos».
Críticas a la oposición y a Luis Juez
Las palabras de Luis Juez también fueron el centro de crítica de José Luis Espert, uno de los diputados liberales que votó en contra. “Cuanto más leo las justificaciones de Juntos de haber votado la Ley FMI a pesar que les parece pésima, me parecen más patéticos, vergonzosos y tristemente. Al final, siempre funcionales al kirchnerismo, como pasó con tantas y malas leyes que les votaron”, posteó en Twitter.
Javier Milei también votó en contra e incluso afirmó que Máximo Kirchner “votó correctamente”, pero por los motivos incorrectos. Según él, tanto el oficialismo como la oposición están siendo cómplices del “ajustazo” que se vendrá sobre el sector privado. Las inconsistencias técnicas, empíricas y morales fueron las que impulsaron su voto negativo.