Este martes, el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, instó a poner fin a la «guerra absurda» iniciada por la invasión rusa de Ucrania hace un mes, advirtiendo que el conflicto «no va a ninguna parte, rápido» y que el pueblo ucraniano está «soportando un infierno en vida».
«Continuar la guerra en Ucrania es moralmente inaceptable, políticamente indefendible y militarmente absurdo», dijo Guterres. Rusia está golpeando el puerto ucraniano sitiado de Mariupol hasta convertirlo en «cenizas de una tierra muerta», dijo su consejo local, describiendo otras dos enormes bombas que cayeron sobre la ciudad que ha estado aislada durante semanas.
«Incluso si cae Mariupol, Ucrania no puede ser conquistada ciudad por ciudad, calle por calle, casa por casa», dijo Guterres. «Esta guerra es imposible de ganar. Tarde o temprano, tendrá que pasar del campo de batalla a la mesa de la paz», agregó. «Es hora de poner fin a esta guerra absurda», puntualizó.
Rusia lanzó lo que llama una «operación militar especial» el 24 de febrero para destruir la infraestructura militar de Ucrania. Ucrania y sus aliados occidentales han acusado a Moscú de atacar a civiles de forma indiscriminada. Moscú niega haber atacado a civiles, informó Reuters.
La viceprimera ministra ucraniana, Iryna Vereshchuk, dijo el martes que al menos 100.000 civiles querían escapar de Mariupol, pero no pudieron debido a la falta de corredores seguros para salir de la ciudad portuaria sitiada. Los bombardeos continuaban a casi un mes de la invasión rusa, que ha dejado cientos de muertos y millones de refugiados.
