La guerra entre Rusia y Ucrania impacta de lleno en el precio de los commodities y, particularmente, el valor del trigo ante la caída en la oferta al verse afectados los dos países con mayor producción del mundo. Este escenario ya se empieza a sentir en Argentina donde se registra un incremento considerable en el precio de la harina y panaderos advierten que los molinos no entregan materia prima. El primer producto que sintió el impacto fue el pan que en algunas panaderías supera los $300 el kilo.
De acuerdo a los reportes en distintas panaderías del área metropolitana, el precio del pan aumentó 20% en los últimos días a raíz del incremento en torno al 52% en el valor de la harina. Tal como habían anticipado economistas, esto es resultado directo del conflicto en el este de Europa que afecta a los dos mayores productores por lo que cayó la oferta y, en consecuencia, elevó el precio.
“Hoy nos encontramos con harina a 1.800 pesos y se estima que de seguir esta situación internacional podría superar los 2.000 pesos”, expresaron desde el sector y remarcaron que algunos llegaron a bajar $3 mil por bolsa de 25 kg. Días atrás, el valor no superaba los $1.200.
En lo inmediato, la especulación golpea fuerte a la Argentina y el sector de los panaderos advierte que además de la suba en el precio, tampoco hay stock. Según explicaron, la faltante de materia prima es porque los molinos se reservan bolsones de harina para venderlo más alto los próximos días si el panorama se mantiene igual.
En diálogo con C5N, el dueño de una de las panaderías más reconocidas de Balvanera habló de “especulación” empresaria. Rusia y Ucrania tienen el 30% del mercado mundial del trigo y, ante la posibilidad de que no se levante esa cosecha debido a la guerra, cayó considerablemente la oferta. Por lo tanto, en Argentina los productores y molinos focalizan sus ojos en el mercado mundial y los dólares.
En consecuencia, la materia prima que sale de nuestro país se destina en su mayoría a la exportación y descuidan la mesa de los argentinos. “Los productores están especulando a que haya un acuerdo mundial para abastecer a cualquiera de los dos países en la posguerra”, enfatizaron desde el sector panaderil. Mientras tanto, en nuestro país los ciudadanos sienten el conflicto bélico en sus bolsillos y golpea a la tan asediada economía. El impacto en el pan podría trasladarse también a otros productos.