Telefe comenzó el 2022 liderando entre los canales de aire. Sin embargo, algunas interesantes propuestas de El Trece hicieron que el canal de las pelotitas ponga toda la carne en el asador para asegurarse no perder el primer lugar. Tal fue el caso ayer de «El primero de nosotros», una ficción nacional que la rompió en el estreno de la mano de un excelente elenco. ¿Cuánto midió el debut de la nueva novela argentina de Telefe?
«Promedio previo de #ElPrimeroDeNosotros con 15.1, un gran pico de 16.2», manifestó el periodista Nacho Rodríguez en Twitter, dando detalles de la noche soñada que tuvo la nueva novela argentina de Telefe. Benjamín Vicuña, Paola Krum, Luciano Castro, Damián De Santo, Mercedes Funes y Jorgelina Aruzzi fueron algunos de los actores de primer nivel que se lucieron ayer en el estreno en el prime time.
Paradójicamente, «El Primero de nosotros» fue producida por Gerardo Rozín, histórico conductor de Telefe que falleció recientemente. «Mirá las cosas de la vida, increíble, porque lo contás y no te lo van a creer. La novela que va a comenzar, que protagoniza Benjamín Vicuña, El primero de nosotros, es una historia de un muchacho que tiene una enfermedad terminal y se lo cuenta a los amigos», expresó recientemente Rodrigo Lussich en «Socios del espectáculo».
«Fue una idea, la trama de la novela, de Gerardo Rozín y Alejandro Tantanian, director de teatro y amigo incondicional de Rozín. Lo cierto es que ese argumento partió con algunas modificaciones, creo que era una chica la protagonista de la cabeza de Gerardo Rozín. Por eso digo, las vueltas tremendas, las paradojas de la vida», agregó el conductor uruguayo de El Trece, dando detalles de cómo fue fue craneada la nueva novela de Telefe.
«Fueron proyectos paralelos que tenían una similitud, por eso después hubo que hacer un arreglo económico. El canal le pagó US$50.000 a Gerardo Rozín por los derechos de esa idea que primogénitamente fue suya y después se adaptó de otra manera. Llevó a una negociación interna que nunca se supo», agregó Adrián Pallares. A lo que Lussich acotó: «Ese argumento termina siendo, en algún modo, el argumento de la vida y la partida tan joven del propio Rozín», sentenció.
