El día lunes se llevó a cabo, en Bielorrusia, la tercera reunión entre diplomáticos de Rusia y Ucrania. Las dos conversaciones anteriores no habían tenido un resultado favorable para terminar con el conflicto. Esta vez, según fuentes ucranianas, hubo «pequeños avances«. Sin embargo, el portavoz ruso, Dmitry Peskov, anunció las condiciones para terminar con la invasión inmediatamente.
En el Kremlin creen que Ucrania está tomando decisiones que perjudican enormemente su hegemonía en el Este de Europa. La búsqueda de ingresar a la OTAN es una de las cuestiones que más exasperan a Vladimir Putin. Se sienten amenazados por la supuesta presencia de Estados Unidos en su frontera. Además, en palabras del Presidente de Rusia, quien la «desnazificación» y «desmilitarización» del país vecino. En ese sentido se basó el portavoz en Moscú.
«Realmente estamos terminando la desmilitarización de Ucrania. La terminaremos. Pero lo principal es que Ucrania cese su acción militar. Deben detener su acción militar y entonces nadie disparará», indicó el portavoz del Kremlin. Luego de comunicar que habría un gran avance si el país agredido cesa con la defensa, Peskov enumeró las condiciones para concluir con la «operación militar especial».
“Ucrania rechazaría cualquier objetivo de ingresar a cualquier bloque. También hemos hablado que deberían reconocer que Crimea es territorio ruso y, además, reconocer que Donetsk y Lugansk son estados independientes. Y eso es todo. Se detendrá en un momento”, argumentó el funcionario encargado de expresar públicamente lo que Vladimir Putin le encarga.
Como cierre al pedido de Rusia, Peskov concluyó: «Deberían hacer enmiendas en su constitucional». Sin embargo, pese a que parece fácil de hacer, en Ucrania no están de acuerdo con las exigencias nombradas. Volodomir Zelensky no quiere ceder a Lugansk y Donetsk. También sostiene que es ilegítimo que se anexe Crimea. Por último insiste en formar parte de la Unión Europea y la OTAN. Al momento el acuerdo parece lejano.
