El pasado 24 de marzo comenzó el operativo militar de Rusia sobre Ucrania en busca de los territorios rusoparlantes del Donbass. Sin embargo, la resistencia que recibió Vladimir Putin fue un obstáculo que no estaba en los planes del presidente ruso aunque su plan avanzó y ahora cambiará de fase. Mientras tanto, las sanciones contra ellos continúan y no parecen estar dispuestos a bajar las armas.
Según informaron desde el Ministerio de Defensa ruso, los «principales objetivos» de tomar ciudades se completaron y ahora avanzan a Fase II en su ataque. En concreto, se concentrarán en «liberar» la zona este de Ucrania, donde se ubican las repúblicas separatistas de Donetsk y Lugansk. Sin embargo, no dejarán de dar batalla en otros puntos del país según NA.
Esta decisión de Putin deja en evidencia que tener múltiples ejes de guerra en simultáneo no le dio éxito y se encontró con una férrea resistencia en Kiev. Es por esto que prefiere concentrar sus fuerzas en los territorios que iba en busca desde un principio, por lo que hay un avance en su operativo. Más allá de esto, el gran éxito de Rusia estuvo en la costa sur, donde el pueblo de Kherson y sus alrededores fueron tomados.
El objetivo de Rusia
Desde un principio que se sabe que Vladimir Putin está dispuesto a ir a fondo contra Ucrania. En una de sus primeras declaraciones el mandatario de Rusia reconoció que quiere «desmilitarizar y desnazificar» a su país limítrofe. Sumado a esto, ponen como condición excluyente para cesar con el fuego que entreguen los territorios en cuestión y que quien primero detenga sus tropas sea Volodímir Zelenski.
¿Cómo están las negociaciones?
Mientras las bombas siguen cayendo en diferentes puntos del territorio ucraniano, los representantes de cada país siguen negociando. El gran objetivo es lograr la paz allí y se avanzó bastante sobre este tema en los últimos días. Sin embargo, el pacto no es total y se estima que para la siguiente semana haya un nuevo encuentro presencial y otro virtual para tocar el tema.