Se cumple un mes desde el inicio del operativo militar de Rusia en Ucrania en busca de los territorios del Donbass. Vladimir Putin puso sus tropas en la frontera y avanzó el 24 de marzo pasado y hasta el día de la fecha continúan los ataques y bombardeos. Tal es así que hay varias ciudades tomadas por el ejército del Kremlin y se teme que lleguen Kiev para controlar todo el país.
En este lapso de tiempo hubo cuatro rondas de negociaciones entre ambos países y en ninguna lograron acordar un alto al fuego. Sin embargo, la vocera de la Cancillería rusa, María Zajarova, reconoció que la situación cambió. Ahora están abiertos a esta posibilidad luego de muchas sanciones aplicadas por diferentes países alrededor del mundo contra Rusia según Télam.
«Partimos de que todavía hay una posibilidad de alcanzar un acuerdo«, admitió Zajarova en una rueda de prensa en Moscú. Además, adelantó que se mantienen conversaciones para llegar a un «arreglo de la situación en Ucrania, su neutralidad y las garantías de seguridad», una grata noticia para todo el mundo. Sin embargo, esto todavía no sucedió y Volodímir Zelenski, presidente ucraniano, exige un referéndum en su país cuando logren acordar.
A pesar de esto, la funcionaria aclaró que la operación militar terminará «una vez comprendan esto los representantes del régimen de Kiev» a quienes acusa de no querer detener la guerra. Por su parte, Putin dejó en claro una y otra vez sus condiciones para alcanzar la paz en Europa aunque ahora bajó levemente sus pretensiones.
Las condiciones de Rusia para detener la guerra
En la primera rueda de negociaciones, Vladimir Putin explicó que están «desnazificando» Ucrania y reveló sus condiciones. En concreto, exigió la independencia de Donetsk y Lugansk además de que quien primero deberá bajas las armas no son ellos. Ahora imponen una paridad para cesar con el fuego aunque el reclamo sobre los territorios rusoparlantes se mantiene.