Ucrania acusó este miércoles a Rusia de romper un alto el fuego para evitar la evacuación de cientos de miles de civiles atrapados en el puerto sitiado de Mariupol, donde la Cruz Roja ha descrito las condiciones como «apocalípticas». El presidente Volodymyr Zelensky tuiteó un video que aparentemente mostraba varias salas de un hospital que habían sido completamente destruidas.
«Rusia continúa reteniendo como rehenes a más de 400.000 personas en Mariupol, bloquea la ayuda humanitaria y la evacuación. Continúan los bombardeos indiscriminados», escribió en Twitter el ministro de Relaciones Exteriores de Ucrania, Dmytro Kuleba. «Casi 3.000 recién nacidos carecen de medicamentos y alimentos», agregó.
Rusia respondió que detendría el fuego para permitir que los civiles huyeran de las ciudades sitiadas, pero los intentos de evacuar Mariupol parecen haber fallado nuevamente, al igual que varios intentos anteriores desde el sábado. Funcionarios en otras ciudades dijeron que algunos civiles habían salido este miércoles a través de corredores seguros, incluso de Sumy y Enerhodar.
Sin embargo, las fuerzas rusas impedían que un convoy de 50 autobuses evacuara a civiles de la ciudad de Bucha, en las afueras de Kiev, dijeron las autoridades locales en una publicación en línea, y agregaron que continúan las conversaciones para permitir que el convoy se vaya, informó Reuters.
Ambos bandos se han acusado mutuamente de violar los altos el fuego que permitirían evacuar Mariupol, que las fuerzas rusas mantienen bajo asedio desde hace más de una semana. Por otro lado, las fuerzas rusas parecen estar reagrupándose cerca de la ciudad oriental de Kharkiv, informó el alcalde Ihor Terekhov, describiendo la situación como muy tensa.