Hace tan solo unas semanas, Vero Lozano se llevó uno de los mayores sustos de su vida tras accidentarse en un centro de ski en Aspen. Según lo que estuvo contando la animadora de «Corta por Lozano», la caída conlleva una larga recuperación pero ya ha mostrado un avance relevante en su trayecto.
Si bien la presentadora ya estuvo haciendo algunas participaciones remotas en su ciclo con el ánimo que la caracteriza, esta vez se animó a mostrarse sin las vendas que llevaba en sus tobillos. «Ayer me sacaron los puntos. Ya puedo usar zapas, no para pararme, sino para que el cerebro ya reciba órdenes de piecitos en acción», explicó en una historia.
Y añadió: «Soy como un bebé que le ponen escarpines. Feliz». En otra publicaciones recientes, Lozano hizo eco de su pasión por salir adelante con ambas extremidades lesionadas y hasta enseñó su rutina de ejercicios. Por supuesto, la conductora de Telefe tiene que tomarse las cosas con calmas para llegar al punto deseado.
Analía Franchín, amiga de Verónica, estuvo presente durante todo el accidente y contó la historia desde afuera: «Estábamos juntas, a un centímetro de distancia. Ella intentó ponerse los bastones debajo de la cola y nunca llegó a sentarse y la silla fue avanzando. La instructora le dijo que se tirara cuando estaba a 30 centímetros del piso. Pero cuando la silla avanzó ya sabíamos que se venía algo horrible y cuando frenó ya estaba como muy alto».
«Una locura, yo la agarraba con una mano, la instructora con otra. Empezaron los minutos de desesperación, de gritos, con ella colgando. En un momento no aguantó más y ahí cayó. Fue una secuencia de terror. Yo vi cómo cayó, cómo rebotó, fue desesperante. Le preguntamos si estaba bien y dijo que sí con la cabeza», añadió para cerrar.