El exgobernador de Salta, Juan Manuel Urtubey, regresó este lunes a las redes sociales. Fue a pocos días de una reunión que organizó con dirigentes de distintos bancos políticos: macristas, radicales y, obviamente, peronistas. El cónclave fue definido como “antigrieta”, lo cual molestó al excandidato a vicepresidente, quien contrapuso: “Es la única vía posible”.
La posición de Urtubey
“Estamos tan mal que una reunión de gente que piensa distinto y que busca dialogar y encontrar coincidencias parece algo inédito”, remarcó Urtubey en su cuenta oficial de Twitter. De esta manera, hizo alusión directa al encuentro que se desarrolló en su casa de la localidad bonaerense de San Isidro con los gobernadores Gerardo Morales (Jujuy) y Juan Schiaretti (Córdoba), entre otras figuras políticas.
En esta misma línea, el salteño remarcó que “hablar de la grieta es hablar del pasado”. Con lo cual, planteó: “Hablemos de lo que dejó la grieta: odio, enfrentamiento, mezquindad, ocuparse de lo que no le interesa a nadie, litros de tinta hablando de internas y de lo que solo a esos políticos les interesa”. Urtubey se despegó así de la disputa entre el kirchnerismo y el macrismo.
Para cerrar, el exmandatario provincial, quien apoyó a Florencio Randazzo –ahora diputado nacional– en las últimas elecciones legislativas, aseveró: “La grieta se abrió y adentro se cayó la gente”. “No hablamos de la tercera vía, hablamos de la única vía posible: Recuperar el diálogo de la política para recuperarlo con la gente”, cerró Urtubey su hilo twittero.
La reunión que tuvo lugar el último miércoles por la noche consistió en una cena, en la que rodaron ideas sobre posibles armados “antigrieta”. Además del anfitrión y los mandatarios provinciales mencionados, dijeron presente los diputados nacionales Florencio Randazzo, Graciela Camaño, Rogelio Frigerio, Emilio Monzó, el radical Ángel Rozas y el intendente de Rosario, Pablo Javkin.
“Va a haber un deterioro”
Más temprano, este mismo lunes, Urtubey dialogó en Cristina Sin Vueltas (Radio Rivadavia) y vaticinó que “va a haber un deterioro creciente a corto plazo” en la Argentina debido a que “no hay elementos para ser optimistas” en cuanto a una “mejora de la actividad económica”. “El problema es que en la grieta nos hundimos todos los argentinos. No podemos perder un minuto más sin debatir”, dijo el salteño.
“Si no se resuelven los problemas estructurales de la Argentina vamos a seguir corriendo atrás de la urgencia. Por eso los políticos nos reunimos para discutir cuestiones de poder y no los problemas de la gente”, continuó el exgobernador provincial, quien le dejó un mensaje a la gestión de Alberto Fernández: “Pareciera que el Gobierno ya dio por perdida la solución y se echan la culpa de un sector a otro. Desde afuera lo que se ve es que buscan culpables y han abandonado la vocación de solucionar el problema”, sentenció.