Este jueves, el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, y la primera ministra de Dinamarca, Mette Frederiksen, llegaron a Kiev para apoyar al presidente de Ucrania, Volodymyr Zelenskiy, en medio de la ofensiva rusa. Los mandatarios, si bien llegaron por separado, fueron recibidos por la viceprimer ministra Olga Stefanishyna en la estación de trenes.
Mette Frederiksen también visitó la ciudad gravemente dañada de Borodyanka, que fue recuperada después de que las tropas rusas se retiraran de la región alrededor de Kiev. «Tenemos la intención de entregar más armas a Ucrania porque eso es lo que más se necesita», dijo Frederiksen mientras caminaba por la ciudad rodeada de soldados armados.
La oficina de Frederiksen dijo que las conversaciones con Zelenskiy se centrarían en un mayor apoyo a los ucranianos y el enjuiciamiento de «crímenes de guerra y violaciones de derechos humanos». Los tres mandatarios mantendrán un almuerzo de trabajo, una entrevista bilateral y una rueda de prensa conjunta ante los medios de comunicación.
Sánchez y Frederiksen siguen los pasos de varios otros líderes europeos, incluida la presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen, y los primeros ministros británico y checo, que han viajado a Ucrania desde la invasión rusa del país en una muestra de apoyo a su presidente y su pueblo, informó Reuters.
Rusia llama a su acción una «operación militar especial» para desmilitarizar Ucrania y erradicar a los que llama nacionalistas peligrosos. Occidente y Kiev acusan al presidente ruso Vladimir Putin de una guerra de agresión no provocada. Moscú niega atacar civiles.