Otro integrante de Generación Zoe fue detenido este martes. El exjuez federal Héctor Luis Yrimia, vinculado con el área jurídica de la empresa, se entregó esta tarde en las oficinas de Interpol en Dubai. Al igual que Leonardo Cositorto y otros socios, tenía pedido de captura internacional solicitado por la fiscal Juliana Companys, en el marco de las acusaciones por asociación ilícita y estafa.
Yrimia, según NA, se había ido del país a fines de diciembre pasado. Este lunes allanaron por la misma causa la casa del padre del ex juez, un ex subcomisario de la Policía de 96 años, en el barrio porteño de Villa Luro, donde secuestraron 565 mil dólares. Al igual que el CEO de Generación Zoe, el exmagistrado podría ser extraditado de Dubai para ser trasladado a Argentina.
Según indicaron fuentes judiciales, el hombre alegó que el dinero correspondía a la venta de dos departamentos en el barrio porteño de Caballito y nada tenía que ver con la empresa. Casualmente, el padre ya había sido demorado semanas atrás, cuando se le encontró un arma sin declarar en otro allanamiento. Junto con él, la pareja del exjuez presenció el allanamiento.
Situación judicial
Martín Magram es quien representa a Héctor Luis Yrimia en Buenos Aires, así como también el estudio Gramática-Ferrari-Gramática en Córdoba. La fiscal Julieta Companys, encabeza en Villa María, provincia de Córdoba, la investigación de la causa.Hasta el momento, hay decenas de denuncias por estafa en sus oficinas, aunque también se realizaron varias más en Goya, Corrientes.
“Hola, cómo andan. Yo soy Luis Yrimia, director jurídico de Generación Zoe y de todo el Grupo Zoe. Volviendo ya de Dubai con todo el equipo, donde la misión propuesta se cumplió en su totalidad: se instaló Zoe en los Emiratos Árabes…”, decía en un video. Allí, él mismo anunciaba la creación de un fideicomiso para que coincidan todos los inversores, lo cual lo involucra aún más en la acusación.
Héctor Yrimia antes de Generación Zoe
Yrimia había sido fiscal federal y luego juez de instrucción porteño, hasta que dejó su cargo en 2004. sospechado de encubrir un caso de torturas en el que acusaban a otro juez, Pablo Bruno. Alberto Nisman también lo denunció como parte del entramado creado para el encubrimiento del atentado contra la AMIA mediante el Memorándum con Irán, aunque luego fue sobreseído.
Ese mismo año, fue sancionado por el Consejo de la Magistratura por haber ordenado la detención de una gerente del Banco de Galicia que no le había entregado los depósitos en dólares a un cliente. De este modo, el prontuario del exjuez de Instrucción de la Capital expone las maniobras irregulares de otros casos con notoria importancia social y mediática.