Padres de niños en edad escolar advirtieron por el incremento de casos de chicos con el síndrome mano-boca-pie. Se trata de una enfermedad viral que provoca heridas en la boca y sarpullidos en las manos y los pies. La palabra de un experto y las recomendaciones para evitar contagios.
Desde la Organización Panamericana de la Salud explicaron que se trata de una infección viral frecuente que se contagia “a través del contacto con manos no lavadas, heces (caca), saliva, mocos o el líquido de las ampollas”. Asimismo, destacaron que los más afectados suelen ser los menores de cinco años que comparten espacios comunes con otros niños.
Síntomas y efectos
En diálogo con C5N, el infectólogo Eduardo López (MN 37586) explicó también que “una enfermedad que en la gran mayoría de los casos comienza en otoño y en invierno”. Respecto a sus síntomas y posibles efectos, subrayó que en casos excepcionales “puede dar complicaciones al sistema nervioso central”. Sin embargo, lo más común es que los chicos terminen presentando “cuadros de deshidratación porque no quieren tragar” debido a las llagas en la garganta.
Asimismo, explicó a los padres que si algún menor atraviesa esta enfermedad es recomendable suministrar “alimentos diluidos o enfriados como helado, que no requieran masticación”. En caso de que la molestia y la fiebre persistan, puede administrarse paracetamol. No obstante, insistió en la necesidad de acudir a un médico para diagnosticar.
Cómo prevenir contagios
La enfermedad puede prevenirse evitando contacto directo con chicos que tienen llagas. «Si un chico comienza con alguno de estos síntomas es conveniente que se quede en casa para que no contagie a los demás», subrayó el infectólogo.
Del mismo modo, aclaró que, si bien el suele afectar a niños en edad de jardín de infantes, también se han visto casos en otros lugares donde se comparten espacios, sin importar la edad.