El G7 renovó su respaldo a Ucrania «hasta la victoria» en una reunión de cancilleres que se hizo en Alemania. Allí, desde Kiev reclamaron a los países miembros que confisquen los bienes rusos para utilizarlos en la reconstrucción del país tras la guerra. Sin embargo, dos líderes occidentales mantuvieron conversaciones con Moscú para destrabar las negociaciones.
Según Télam, el ministro de Relaciones Exteriores de Francia, Jean-Yves Le Drian remarcó «vamos a continuar apoyando de manera permanente el combate de Ucrania por su soberanía, hasta la victoria». A su vez, desde el Reino Unido pidieron que se envíen más armas a Kiev y que se adopten nuevas sanciones contra Vladimir Putin.
En ese sentido, la ministra de Relaciones Exteriores británica, Liz Truss, subrayó que «es muy importante en este momento mantener la presión sobre (el presidente ruso) Vladimir Putin suministrando más armas a Ucrania e incrementando las sanciones a Rusia». A su vez, remarcó que la unidad del G7 fue «vital durante esta crisis para proteger la libertad y la democracia».
Por su parte, el ministro de Relaciones Exteriores de Ucrania, Dmytro Kuleba, pidió al G7 confiscar bienes rusos que servirán en la reconstrucción de su país. En ese sentido, explicó «Hoy pedí a los Estados del G7 que adopten leyes y establezcan todos los procedimientos necesarios para confiscar bienes rusos y dárselos a Ucrania para la reconstrucción».
Asimismo, el jefe de la diplomacia de la Unión Europea (UE), Josep Borrell, anunció durante la reunión que el bloque brindará 500 millones de euros (unos 520 millones de dólares) adicionales de ayuda militar para Ucrania. Con este nuevo financiamiento, el aporte total de la UE para apoyar el esfuerzo militar ucraniano se elevará a 2.000 millones de euros.
