El ministro de Economía Martín Guzmán gana poder dentro del Gobierno. Uno de los funcionarios más respaldados por el presidente Alberto Fernández tendrá a su cargo la Secretaría de Comercio Interior. Se trata del área que controla los precios, actualmente conducida por Roberto Feletti, dirigente afín a la Cristina Kirchner. ¿Es éste un nuevo mensaje al entorno de la vicepresidenta?
De esta manera, Comercio Interior dejará de estar en la órbita del Ministerio de Desarrollo Productivo a cargo de Matías Kulfas. La búsqueda de la Casa Rosada es que el ministro Guzmán tenga más influencia en la política de precios, para que su par Kulfas se concentre en alentar inversiones. Acorde a NA y Télam, ambos funcionarios albertistas consensuaron la medida, la cual sería oficializada en las próximas horas a través de un comunicado.
La decisión de este traspaso se conoce apenas 48 horas después de la reunión que mantuvieron Guzmán y Feletti, referentes de las dos posturas que están en disputa tanto dentro del Gobierno como del Frente de Todos. De hecho, ambos venían de sostener diferencias públicas acerca del control de precios, pero decidieron reunirse para evaluar medidas contra la inflación.
El ida y vuelta entre Guzmán y Feletti
Feletti insiste con reclamar una suba en las retenciones a las exportaciones de cereales, para frenar la suba de precios en el mercado interno. Curiosamente, el presidente Fernández propuso este viernes aumentar las retenciones a los granos. Hasta pidió colaboración de la oposición en el Congreso de la Nación. No obstante, Guzmán rechaza esta posibilidad y a cambio propone el impuesto a la “renta inesperada”.
Lo cierto es que, hasta entonces, la “guerra contra la inflación” declarada por el mandatario no tuvo hasta ahora los resultados esperados. Pues, los precios de los alimentos acumularon una suba cercana al 30% en el primer cuatrimestre del año. El encuentro entre Guzmán y Feletti fue de gestión y rutina, pero la decisión de que Comercio Interior pase a depender la cartera económica fue finalmente el eje central de esa reunión.
El jefe del Palacio de Hacienda hizo declaraciones públicas tras haberse encontrado con Feletti, pero básicamente se refirió a la inflación. Dijo que en de mayo “viene desacelerándose con respecto a la de abril”. “Marzo fue el peor del año (con la inflación, que llegó al 6,7%). Ahora, la inflación de mayo viene desacelerándose con respecto a la de abril (que fue del 6%)”, remarcó.
Asimismo, aclaró: “Todavía falta mucho, estamos a mediados de mayo. Pero vencer la inercia en el proceso inflacionario no va a ser una tarea simple, requiere de un conjunto de políticas consistentes”, señaló. En tanto, en declaraciones al canal C5N, Guzmán sostuvo que la inflación “siempre es un problema y un mal para el funcionamiento del sistema económico”.
Los rounds más duros de la batalla económica
Primer round: Feletti vs. Guzmán. El pasado 7 de abril, el secretario de Comercio Interior lanzó el primer embate contra el ministro de Economía ante los medios. “Estamos en un mundo muy difícil y el ministerio de Economía tiene que bajar líneas claras de política económica que reduzcan la volatilidad y preserven ingresos populares, si no esto se va poner feo”, advirtió el funcionario.
Ese mismo día, el dirigente K había anticipado que la inflación de marzo “va a ser alta”, pero remarcó que controlar la escalada de precios va más allá de su tarea. “Controlar la inflación es tarea de la macroeconomía, del diseño del Ministerio de Economía”, expresó. Y agregó: “Bajar la inflación implica macroeconomía y política económica”. Por último, sentenció: “No hacemos milagros. Las canastas han funcionado y mejoraron los precios de referencia, pero es insuficiente”.
Segundo round: la respuesta de Guzmán. El último 11 de abril, el titular del Palacio de Hacienda bridó una entrevista en C5N, donde se mostró con un tono político fuerte y le contestó a Feletti. “La inflación no se va a reducir (solo) con políticas de precios”, dijo el funcionario. En esta misma línea, remarcó que “se ataca con política macroeconómica”.
Asimismo, esgrimió que para ello “se necesita un programa económico que ya existe”, pero que “hace falta un apoyo político claro en lugar de llevar acciones que generan incertidumbre”. Y, finalmente, expresó que Feletti debe reportar a él y seguir la línea de Alberto Fernández. “Seguiremos con aquellos que estén alineados con el plan económico”, advirtió un envalentonado Guzmán.
Tercer round: Kicillof entra al juego. Al día siguiente de la contestación de Guzmán, el gobernador bonaerense Axel Kicillof presentó en Ensenada su plan antiinflacionario para frenar la escalada de precios. La propuesta se centra en ampliar la oferta dándole mayor espacio a los productores y pequeños comerciantes, como así fortalecer los controles a los hipermercados.
“Acá está todo lo bueno, lo que debe ser. Baja intermediación, productor directo al mercado de proximidad, acotar los márgenes de intermediación, menor logística, todo se traduce en alimentos más baratos para el pueblo”, elogió Feletti al exministro de Economía nacional. Lejos de esconder las diferencias dentro de la Rosada, el albertismo y el kirchnerismo siguen sumando nuevas disputas internas. ¿Cómo será la relación Guzmán-Feletti a partir de este traspaso?