A horas de iniciar su gira por Europa, Alberto Fernández participó del 57° Congreso Ordinario de la Federación de Asociaciones de Trabajadores de la Sanidad Argentina (FATSA). Allí, agradeció a los médicos y enfermeros por enfrentarse a la pandemia, algo que marcó un antes y después en Argentina y el mundo. Sin embargo, no se quedó atrás con las críticas a Mauricio Macri por eliminar el Ministerio de Salud. Tampoco se guardó comentarios sobre la interna con su partido, principalmente, con Cristina Kirchner.
“Vivimos una pandemia que afectó a todo el mundo. A la Argentina, esa pandemia la encontró con un sistema de salud devastado, porque el Estado se había retirado de la atención sanitaria. Hagamos memoria. Las vacunas se vencían en los galpones de la Aduana, hagamos memoria del sarampión, que volvió a ser una enfermedad entre los argentinos. Hagamos memoria”, indicó el jefe de Estado en la conferencia de prensa.
También recordó las palabras de Ginés González García, exministro de Salud que renunció luego del escándalo por las vacunas VIP, quien le dijo que “en los hospitales no había insumos”. Además, destacó que en su gestión terminaron de construir hospitales porque “en una época, algunos gobernadores en Buenos Aires decían que no tenía sentido construir hospitales”, haciendo una clara referencia a los dichos de María Eugenia Vidal.
“Tuvimos que hacer todo eso, tuvimos que hacerlo en poco tiempo. Los hospitales que había no nos alcanzaban. Vivimos en un mundo donde 6 millones de personas fueron muertas por el covid-19. Todos los que quedamos en pie somos sobrevivientes de la mayor tragedia que la humanidad ha vivido”, enfatizó Alberto Fernández, quien también recordó a los “más de 100.000 muertos en Argentina”.
«En mi gobierno no he ocultado los problemas de la Argentina»
Posteriormente, el primer mandatario dio declaraciones sobre la gestión de su Gobierno en respuesta a dichos realizados por aliados a Cristina Kirchner, tales como Hebe de Bonafini y Andrés Larroque. “En mi gobierno no he ocultado los problemas de la Argentina, nunca me hice el distraído: ni frente a la pobreza, ni frente a la desigualdad, ni frente a la falta de trabajo. Soy peronista y cuando me entero de un problema le pongo el pecho”, expuso, luego de ser acusado de “tibio” por el sector del kirchnerismo duro.
“A los problemas no los oculto. Yo sé que la economía crece, sé que el trabajo aumenta, sé que la distribución está teniendo problemas por los índices de inflación que tenemos”, amplió. Además, señaló que su Gobierno está “obsesionado” con la generación de trabajo y la recuperación del salario. “Recuperar un salario que, entre 2015 y 2019, se cayó 20 puntos en términos reales, demanda esfuerzo y trabajo”.
Alberto Fernández se metió contra el sector empresarial
Ante eso, apuntó contra el sector empresarial para pedir más igualdad de condiciones, algo que ya le ha traído problemas por ser inflexible. “Demanda pedirle a los poderosos que distribuyan adecuadamente la riqueza, que además de ganar ellos, tienen que ganar los que trabajan. Les hablo con esta franqueza porque, antes que presidente, soy un militante político”.
Por último, hablando en oposición a “los conservadores” que siguen sosteniendo las desigualdades económicas, Alberto Fernández prometió, como peronista, ocuparse de mitigar la concentración de riqueza. “Vamos a poner todo nuestro empeño para que la igualdad la recuperemos en la Argentina; voy a trabajar incansablemente para que cada vez haya más dinero en el bolsillo de los que trabajan”.
