En la tarde de hoy el presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa, se fue del Congreso de la Nación porque tenían dos reuniones. Primero fue a visitar a Cristina Kirchner y tras su encuentro allí viajó hasta la Casa Rosada para charlar con Alberto Fernández. Se pensó que era por las internas entre ambos en el Frente de Todos aunque el funcionario lo negó.
En su explicación, el dirigente asegura que «fue por un laburo» del Congreso lo que lo llevó a encontrarse con ambos. Lo que sucede es que el oficialismo pidió una sesión especial para las 11:00 cuando en Juntos por el Cambio lo habían hecho anteriormente para las 12:00 y no quería que los debates se entrecrucen o no se pueda llevar a cabo alguno.
A su vez, Sergio Massa reveló que «había quedado en hacerlo la semana que viene, pero como se aceleró la sesión de mañana, Alberto me dijo de almorzar hoy, y quedaron combinadas (las reuniones), pero no tiene ninguna correlación con el funcionamiento del Frente de Todos, ni del debate interno, tiene que ver con laburo», detalló según NA.
En este mismo sentido remarcó que «en este contexto se habla mucho de versiones pero centralmente fue eso». Claro está que un sector oficialista no le cree el argumento al presidente de la Cámara de Diputados e intuyen que él podría ser el «vocero» entre ambas partes que no mantienen diálogo entre ellos. A su vez, el funcionario también quedó e el ojo de la tormenta por designar a Roxana Reyes para el Consejo de la Magistratura.
Sergio Massa, el mediador
Al igual que hizo en el Congreso de la Nación al unificar las sesiones, Sergio Massa hace de mediador entre Alberto Fernández y Cristina Kirchner. El dirigente está en medio de ambos en cuento a confianza y cercanía por lo que su rol será determinante para la interna del Frente de Todos y su resolución antes de las elecciones del 2023.
