Hace algunos días se subastó la camiseta de Diego Armando Maradona del partido de la Selección Argentina frente a Inglaterra en el Mundial de México 1986 por una cifra multimillonaria que marcó un récord en el deporte. La noticia generó un alto impacto y sorprendió a todo el mundo del fútbol. Sin embargo, Peter Shilton, el arquero que sufrió aquellos dos goles históricos, volvió a atacar a Diego. Pero la respuesta fue letal: el «Chiqui» Tapia se burló de él.
«No hubiera cambiado camisetas con Maradona ni por todo el té en China por lo que sucedió ese día. Ni siquiera lo usaría en la casa, ni siquiera para lavar los platos en mi bungalow», dijo Shilton. «Era capitán ese día, todavía me duele ahora. Lo único que me interesaba era ganar la Copa del Mundo, nunca se me ocurrió cambiar la camiseta con Maradona, pero mirando a cuánto se ha vendido, tal vez debería haberlo hecho», agregó.
En su charla con el medio británico The Sun, el histórico guardameta aseguró que el plantel inglés no sabía que Steve Hodge tenía la casaca de Diego. «Si yo y algunos de los otros jugadores hubiéramos sabido que Hodgey tenía su camiseta en el vestidor, no lo hubiese logrado. En el fervor del partido, la habríamos roto en mil pedazos, y apuesto a que Hodge está feliz ahora que no hicimos eso. Él sabía lo que estaba haciendo cuando no nos dijo que lo tenía», sostuvo.
La respuesta del Chiqui Tapia
«Mirando hacia atrás, apuesto a que está contento de que no nos hayamos enterado. Estábamos muy enojados, menos mal que no lo hicimos. Me alegro de que un inglés haya sacado algo del juego», aseguró Shilton. Y luego añadió: «Nos hemos reído los últimos. Es justicia poética por haber sido estafado en esa Copa del Mundo. Es el mejor negocio que haya hecho un futbolista». Sus dichos generaron polémica en Argentina.
«Me alegro por Hodge. Él tiene venganza por todos nosotros. Ha ganado una gran cantidad de dinero con Maradona engañándonos. Es una fortuna para lo que fue uno de los partidos más difíciles de mi carrera», sentenció Shilton. Pero ya le llegó una respuesta letal: a través de su cuenta de Twitter, el presidente de la AFA le respondió con emojis de una mano, una bandera argentina, un trofeo y el número 1986. Clarito.