Tras el escándalo ocurrido en el Aeropuerto de Ezeiza, la Justicia inició una investigación sobre el avión iraní-venezolano. Los 15 venezolanos y 4 iraníes involucrados han sido imputados por presunto ataque terrorista aunque el piloto, Gholamreza Ghasemi es el más complicado en esta cuestión ya que él era el responsable de la aeronave que desembarcó en Argentina.
A raíz de las denuncias de parte de los organismos internacionales, la fiscalía decidió peritar los dispositivos electrónicos de cada tripulante. En el caso del piloto han hallado fotos de tanques, misiles y banderas con consignas en farsí contra Israel. Todas ellas se encontraban en el teléfono de Ghasemi
Además, se filtraron fotos suyas de cuando era jóvenes como miembro de la Guardia Revolucionaria Al Quds de Irán según consignó Télam. A raíz de esto, que se descubrió en el mediodía del martes, la fiscal Cecilia Incardona ordenó realizar más pruebas identificatorias sobre los tripulantes y el cargamento además de la hoja de ruta de la aeronave que también cuenta con irregularidades.
¿Hay sospechas de un ataque terrorista?
Según indicó en un comunicado, la fiscal tiene sospechas de un ataque terrorista o que, en su defecto, la carga del avión realmente es una excusa. La investigación está centrada en descubrir si realmente venían a traer autopartes a la Argentina o si realmente tenían otros fines, como por ejemplo extraer información o evaluar los métodos para filtrar la PSA.
Puede haber sido «un acto de preparación para proveer bienes o dinero que pudieran utilizarse para una actividad de terrorismo, su financiamiento u organización», indica la resolución. Además hallaron diferencias entre las tripulaciones que estuvieron en México y la que llegó a la Argentina además de que el plan de vuelo, a nombre de Qushm Fars Air, se modificó.