La crisis económica y social, agravada por los coletazos de la pandemia, marcaron considerablemente el presente que el país sufre en el día de hoy. Con el dólar a $232 y la inflación disparada, sumado a otros escándalos de índole político, la sociedad expresa cada vez más el hartazgo por el deterioro de las condiciones de vida. Así lo remarcó Jonatan Viale al nombrar algunos ejemplos de ello.
Los primeros que mencionó, en su columna editorial de Radio Rivadavia, son relacionados a Ginés González García, exministro de Salud que tuvo que renunciar cuando se conoció el vacunatorio VIP. El exfuncionario fue escrachado tanto en un restaurante de Puerto Madero como en un mercadito de una estación de servicio, en donde no le dejaron permanecer.
“El argentino está harto de ser humillado por este grupito que se cree superior, que se cree que puede hacer lo que quiere y que no va a tener consecuencias lo que hicieron. Yo creo que están hartos y esto es peligroso para ellos”. Así, mencionó que, pese a que no hubo una condena judicial, sí hay una social, ya que la memoria colectiva no es frágil.
“Esta gente no puede caminar más por la calle. No digo ni que esté bien ni que esté mal. Es un dato”, postuló. “Es como que la sociedad ya elaboró su propia condena porque sabe que esta gente ha robado las vacunas e incluso hizo un negocio con eso”, agregó al incluir a toda una organización de personas que participó en el encubrimiento del vacunatorio VIP.
Responsabilidad de Cristina Kirchner
Sobre esto hizo responsable a Cristina Kirchner, quien ahora intenta separarse de las decisiones de Gobierno pese a ser ella una de las máximas responsables. “¿Te tomarías un café con Cristina? ¿Con alguien que no se arrepiente haber robado una, ocho, mil vacunas a un señor de 75 años? Cristina es la que vacunó a su jardinero antes que nadie, Cristina es la socia de Rusia, Cristina es la socia de un señor que lavó USD 55 millones de dólares (Carlos Melconian).
Así, nombró varios sucesos que realizó a lo largo de toda su carrera política, entre ellos, escrachar a artistas y periodistas, e ir en contra de Alberto Nisman. “La única manera de construir un país serio es ser funcionales a gente nefasta. Yo entiendo que para Melconian era importante completar su álbum de figuritas; priorizó su ego, su pedantería, no le importó que haya una persona que le haga daño al país hace 19 años”.
¿Por qué le temen tanto?
De esta manera, se preguntó por qué la gente le tiene tanto miedo a la vicepresidenta. “¿Cuán importante puede ser charlar con una persona así?”, se preguntó Jonatan Viale. “Cristina no solo desprecia, sino que odia a todo aquel que no piensa como ella. Pero es muy inteligente, está haciendo un show. Juega a ser opositora, quiere hacerte creer que no tiene nada que ver con este Gobierno”, determinó.
