Las organizaciones indígenas y el Gobierno de Guillermo Lasso en Ecuador no lograron el lunes un acuerdo sobre mayores recortes en los precios del combustible y límites al desarrollo petrolero y minero, en una reunión que buscaba terminar con dos semanas de protestas que está amenazando la producción de crudo.
El presidente conservador Lasso anunció la noche del domingo una baja de 10 centavos de dólar en el precio de la gasolina extra y el diésel, una nueva concesión para tratar de sofocar las manifestaciones, en ocasiones violentas, que comenzaron el 13 de junio.
Al menos siete personas han muerto en relación con las protestas, mientras que la producción de petróleo del país se ha reducido a la mitad y el Ministerio de Energía anunció que es posible tener que detener el bombeo este martes debido a la falta de suministros para la operación de los campos.
Lasso, cuya relación con la Asamblea Nacional ha empeorado durante las protestas, también anunció fertilizantes subsidiados, condonación de deudas y créditos baratos. Los grupos indígenas, liderados por la CONAIE, expresaron que las rebajas de Lasso, que ponían la gasolina extra a 2,45 dólares por galón y a 1,80 dólares el galón de diésel no eran suficiente, pero acordaron reunirse con representantes del gobierno, informó Reuters.
La CONAIE buscaba en su propuesta inicial que el combustible extra su congele en 2,10 dólares el galón y diésel en 1,50 dólares y que se limite la expansión petrolera y minera. Lasso informó que la reducción del precio del combustible y otras concesiones costará unos 600 millones de dólares.
El ministro de Gobierno, Francisco Jiménez, explicó durante la reunión que no podían bajar más el precio de los combustibles, pero se mostró dispuesto a considerar subsidios para grupos específicos. También sostuvo la apertura oficial a discutir cambios en las políticas petroleras y mineras. «Vemos que hay poca voluntad sobre los temas sustanciales», dijo el presidente de la CONAIE, Leonidas Iza.
