El presidente ejecutivo de Tesla, Elon Musk, pidió a los empleados que regresen a la oficina o abandonen la empresa, según un memorando enviado al personal que ha estado circulando en las redes sociales. «Cualquiera que desee hacer trabajo remoto debe estar en la oficina por un mínimo (y me refiero a un mínimo) de 40 horas por semana o partir de Tesla», decía el documento enviado a los empleados.
Reuters no pudo verificar de inmediato la autenticidad del memorando y Tesla no respondió a una solicitud de comentarios de la agencia. Tampoco el magnate no pudo ser contactado para hacer comentarios sobre el tema. En respuesta al memorando que se tuiteó desde una cuenta no verificada, el multimillonario contestó: «Deberían fingir que trabajan en otro lugar».
Musk «revisaría y aprobaría» cualquier caso en el que no pudieran cumplir con el mínimo, según el memorando. Tesla se une a una ola de empresas que exigen el regreso a la oficina de los empleados. Si bien algunos grandes empleadores han adoptado políticas voluntarias de trabajo desde el hogar de forma permanente, otros, apuestan a que es mejor impulsar las interacciones en persona entre colegas.
El comunicado
El asunto era «El trabajo remoto ya no es aceptable». Musk escribió que «cualquiera que desee hacer trabajo remoto debe estar en la oficina por un mínimo (y me refiero a *mínimo*) de 40 horas por semana o partir de Tesla. Esto es menos de lo que les pedimos a los trabajadores de las fábricas», reza el memorándum, informaron Reuters y Bloomberg.
El CEO continuó especificando que la oficina «debe ser una oficina principal de Tesla, no una sucursal remota que no esté relacionada con las funciones del trabajo. Por ejemplo, ser responsable de las relaciones humanas en la fábrica de Fremont, pero tener su oficina en otro estado».
Miles de empleados han estado efectivamente encerrados durante meses, trabajando en turnos de 12 horas, seis días a la semana. Hasta hace poco, muchos dormían en el piso de la fábrica como parte de un sistema de circuito cerrado destinado a mantener alejado al coronavirus y a los autos saliendo de la línea de producción.
Para que la fábrica vuelva a funcionar, los empleados contratados están siendo transportados entre las instalaciones y sus dormitorios. Ya sean fábricas en desuso o un antiguo campamento militar, y los trabajadores del turno de día y de noche comparten camas en dormitorios improvisados.