Locho Loccisano es sin dudas el participante más importante de «El hotel de los famosos». Es que el conductor comenzó a ser muy querido por la audiencia luego de que sus compañeros en el reality de convivencia lo dejaran de lado. Tras asentarse en la competencia de destreza, el influencer se perfila como uno de los potenciales ganadores del ciclo. A un paso de la gran final, la mamá de Locho Loccisano reveló como fue la crianza del participante de «El hotel de los famosos».
«Cuando lo trataban con desprecio él se preguntaba ‘¿hay algo mal en mí?’», comenzó diciendo Mónica Meroni en diálogo con «Socios del espectáculo». Luego, la mamá de Locho reveló cómo fue la crianza del influencer: «Nosotros en la convivencia, como familia, siempre fuimos muy relajados. No somos malintencionados y tenemos un código libre para manejarnos. Eso, me hago cargo, no fui estricta con los límites”, precisó.
«¿Es malcriado?», le preguntó Adrián Pallares. A lo que Mónica le respondió: «Es excelente persona. Me hago cargo porque los límites como persona estuvieron, pero como soy relajada eso tal vez hizo que la convivencia, como el tema de hacer la cama, sea polémica», precisó la mamá de Locho Loccisano, haciendo una autocrítica en la pantalla de El Trece. Sin dudas, su hijo es el preferido del público para coronarse en el reality.
«Es lindo, inteligente, bueno y simpático. ¡Una amenaza para cualquiera! Soy una madre orgullosa. Él no es políticamente correcto para nada. Apareció con sus creencias y sus miedos, se mostró transparente. Es una amenaza para cualquiera con problemas de autoestima», agregó Mónica Meroni, analizando las fuertes críticas que recibió Locho en su ingreso al programa. Pese a la buena predisposición que mostró de entrada, el influencer no fue aceptado por varios compañeros.
Locho, el apuntado dentro del hotel
Santiago del Azar, excocinero del programa, reconoció las críticas que recibía Locho en el hotel. «Yo estaba todas las mañanas y todo el tiempo recibía los comentarios de ‘¡Qué boludo este pibe!’. Es verdad que desde que entró, le dieron, le dieron y le dieron. Por eso me hubiera gustado estar con él, para pararle un poco el carro al resto. Como le daban a Locho no me gustaba nada porque era un maltrato continuo, hostigamiento», precisó en «Intrusos».