El boleto de los colectivos y de los trenes del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) aumentarán 40% a partir del lunes 1º de agosto, tras haber estado congelados por más de tres años. Asimismo, se mantendrá la tarifa social del transporte público, es decir, el descuento del 55% del pasaje para los grupos designados con atribuciones sociales a través de la tarjeta SUBE, y el sistema de Red Sube.
También continuará la asistencia económica a los sectores de la población con mayor vulnerabilidad social con la tarifa social mediante la tarjeta SUBE, para generar un ámbito de igualdad de oportunidades, herramientas y recursos en el acceso al transporte público. El beneficio alcanza a Jubilados y/o pensionados, trabajadores de casas particulares; veteranos de la Guerra de Malvinas; monotributistas sociales y beneficiarios de determinados programas estatales.
En cuanto a la Red Sube, vale recordar que abarca a cinco combinaciones de transporte público –ya sea trenes, colectivos, Metrobús y Subte– en dos horas, y que aplica un descuento del 50% de la tarifa al momento del segundo viaje, y un 75% menos del valor de la tarifa a partir del tercer viaje realizado. La medida se oficializó este viernes a través de la Resolución 514/2022 publicada en el Boletín Oficial.
De esta manera, a partir del lunes, el boleto de los colectivos tendrá estos valores, según los tramos. De 0 a 3 kilómetros (kms.) pasa de $18 a $25,20; de 3 a 6 kms. pasa de $20 a $28; el de 6 a 12 kms. pasa de $21 a $29,40; el tramo de 12 a 27 kms. pasa de $22 a $30,80, y más de 27 kms. pasa de $23 a $32,20.
En lo que hace a trenes, en las líneas Mitre, Sarmiento y San Martín el boleto será de $17,25; en la línea Urquiza de $11,25; en las líneas Roca y Belgrano Sur de $10,75 y en la línea Belgrano Norte $9,50.
¿Por qué aumenta el boleto de coletivos y trenes en el AMBA?
El aumento se concreta en momentos en que el Gobierno nacional mantiene una disputa con las cámaras empresarias del transporte público, que reclaman el pago de subsidios atrasados. Las patronales realizan en ese marco un lockout que llevó a la reducción de las frecuencias de los servicios en varias líneas, lo que provoca demoras y afecta a los usuarios.
Autoridades del Ministerio de Transporte de la Nación y representantes de los empresarios mantuvieron ya una reunión para analizar la situación generada por el atraso en el pago de los subsidios, y avanzar en la búsqueda de una solución. Los empresarios aseguran que “el desfasaje es de un mes” e implica cerca de $ 18.000 millones para las 170 empresas que operan en la región metropolitana, a través de unas 300 líneas de colectivos.
Desde la cartera de Transporte señalaron que en las tarifas no se vieron traducidos los costos que generan para el sector las recomposiciones salariales, los incrementos en los precios de insumos y servicios, incluyendo al gasoil; el examen psicofísico para obtener las licencias habilitantes, el precio del material rodante, como también se han incorporado nuevos costos referidos a las medidas de prevención de la propagación del Covid-19.
“Con la finalidad de mantener la ecuación económico-financiera que permita el sostenimiento del servicio público del transporte automotor y ferroviario de pasajeros involucrado, en condiciones de calidad y eficiencia, resulta necesario trasladar una parte de los costos de explotación de tales servicios a los cuadros tarifarios”, remarcaron en su momento desde el ministerio que encabeza Alexis Guerrera.
Ramales de larga distancia afectados
Los aumentos también impactarán en los cuadros tarifarios de los ramales de larga distancia que unen la Ciudad de Buenos Aires con Mar del Plata, Bahía Blanca, Pinamar, Justo Daract, Tucumán, Córdoba, Rosario y Pehuajó; así como en los interurbanos regionales en Chaco, Salta, Neuquén, Entre Ríos, Córdoba y Misiones, y en los servicios locales extendidos en la Provincia de Buenos Aires.
Consulta ciudadana para definir los aumentos
Para concretar el aumento, Transporte convocó a una consulta ciudadana como paso previo, indicando a los ciudadanos la importancia de la implementación de esta instancia de participación para que “la ciudadanía se exprese en la modificación de los cuadros tarifarios aplicables a los servicios en cuestión, y así garantizar los principios de igualdad, publicidad, informalidad y gratuidad de todos los argentinos y argentinas”.