La Justicia de Perú allanó la noche del martes sin suerte el Palacio de Gobierno en Lima en busca de la cuñada del presidente izquierdista Pedro Castillo, para detenerla por su presunta participación en una red de corrupción y lavado de activos.
El operativo policial para detener a Yenifer Paredes fue realizado a pedido de la Fiscalía, que solicitó el «allanamiento» de la «zona residencial del palacio de gobierno», dijo la Corte de Justicia peruana en un comunicado. Después de casi cuatro horas de búsqueda, los agentes se retiraron de la residencia presidencial sin hallar a Paredes, prófuga de la justicia, informó Télam.
El operativo no tiene precedentes en la historia peruana, donde jamás la Justicia había ingresado a la sede del Poder Ejecutivo para detener a una persona. Castillo y su familia, incluida su cuñada, de 26 años, quien considera «padres» al presidente y su esposa, viven en la residencia presidencial que forma parte del Palacio de Gobierno.
El mandatario calificó el allanamiento de «ilegal». El allanamiento llegó horas después de que el Congreso recomendar procesar penalmente a Castillo e inhabilitarlo por cinco años alegando que incurrió en traición a la Patria al considerar un posible referendo popular sobre otorgar una salida al mar a Bolivia.
La fiscalía tiene abiertas cinco investigaciones contra Castillo por supuesta corrupción, otra situación sin precedentes contra un presidente en funciones. Por el caso que motivó el allanamiento de la noche del martes, Paredes ya había sido citada a declarar ante el Ministerio Público y a comparecer ante una comisión de control del Congreso peruano, a mediados del mes pasado.
La cuñada de Castillo es la cuarta persona del entorno presidencial investigada por casos de presunta corrupción. Los otros colaboradores de Castillo procesados son un sobrino que fungía de asesor, su exministro de Transporte, ambos prófugos de la justicia, y su exsecretario presidencial.