El Estado Mayor ucraniano informó este martes que Rusia efectuó ataques aéreos y de artillería en la región de Zaporiyia, donde los combates cerca de la mayor central nuclear de Europa han hecho temer un incidente nuclear catastrófico. Los ataques se producen en vísperas del Día de la Independencia de Ucrania, que se celebra el miércoles para conmemorar la liberación del régimen soviético.
La embajada estadounidense en Kiev también advirtió de los planes rusos de atacar infraestructuras civiles y gubernamentales en los próximos días. Cerca de los frentes en el sur del país, Ucrania dijo que Moscú disparó artillería y realizó ataques aéreos en varias ciudades de la región de Zaporiyia, donde el ejército ruso capturó la planta de energía nuclear en febrero.
Los disparos de artillería y misiles cerca del complejo del reactor nuclear de Zaporiyia, en la orilla sur del río Dniéper, han llevado a pedir la desmilitarización de la zona. Los ucranianos que viven en las cercanías expresaron su temor de que los proyectiles alcancen uno de los seis reactores de la planta, con consecuencias desastrosas.
«Por supuesto, estamos preocupados. (…) Es como estar sentados sobre un barril de pólvora», dijo el lunes Alexander Lifirenko, residente de la cercana ciudad de Energodar. El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, ha advertido de que Moscú podría intentar «algo especialmente feo» en vísperas del 31º aniversario de la independencia, que también marca el medio año de la invasión rusa, informó Reuters.
Por temor a nuevos ataques con misiles, las autoridades de Kiev prohibieron los actos públicos relacionados con el aniversario de la independencia desde el lunes hasta el jueves. La capital está lejos de las líneas del frente y sólo ha sido alcanzada en contadas ocasiones por misiles rusos desde que Ucrania repelió una ofensiva terrestre para tomar la capital en marzo.
El temor a los atentados ha aumentado después que el Servicio Federal de Seguridad de Rusia acusara el lunes a agentes ucranianos de matar a Darya Dugina, hija de un ideólogo ultranacionalista ruso, en un atentado con coche bomba cerca de Moscú que el presidente Vladimir Putin calificó de «malvado». Ucrania niega su implicación en el hecho.