Dos empleados de la central nuclear de Zaporiyia, controlada por Rusia, han sido detenidos por transmitir información a las autoridades de Ucrania. Según informó este miércoles la Guardia Nacional rusa, han impedido lo que denominó «acciones ilegales» que, afirmó, amenazaban la seguridad de la planta, ya que estos dos operarios pasaban información a Kiev sobre la ubicación del personal y el equipo en el lugar.
La Guardia Nacional rusa añadió que también detuvo a una tercera persona que habría violado los procedimientos de acceso a la planta, describiéndola en un comunicado como «un cómplice de las Fuerzas Armadas de Ucrania, que transmitió las coordenadas del movimiento de columnas de equipos rusos». No hubo comentarios inmediatos por parte de Ucrania.
La central nuclear de Zaporiyia, la mayor de Europa, fue capturada por las fuerzas rusas en marzo. Sigue estando cerca de la línea del frente de batalla y ha sido objeto de repetidos disparos en las últimas semanas, lo que ha hecho temer una catástrofe nuclear. Tanto Rusia como Ucrania se han acusado mutuamente de bombardear la planta.
El personal ucraniano sigue operando los reactores. Un técnico ucraniano que se encontraba en las instalaciones dijo a Reuters la semana pasada que el personal está trabajando bajo una enorme presión, con soldados rusos fuertemente armados patrullando todas las zonas del emplazamiento, a pesar de lo cual los empleados ucranianos siguen en el lugar para garantizar que no se produzca una catástrofe nuclear como la de Chernóbil.
Vladimir Rogov, representante de la autoridad instalada por Moscú en la parte de la región de Zaporiyia ocupada por Moscú, explicó que otras dos personas -un guardia de seguridad y un ingeniero- habían sido detenidas el 17 de agosto, acusadas de ayudar a las fuerzas ucranianas a dirigir los ataques contra la planta.
Ucrania niega haber bombardeado la central nuclear y afirma que Rusia lo utiliza como escudo para poder lanzar ataques contra el territorio circundante. La ONU ha pedido la desmilitarización de la zona, mientras que su organismo de control nuclear, el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), está intentando acceder a las instalaciones.