El diputado nacional Máximo Kirchner apura una jugada interna ante la situación judicial de su madre, Cristina Kirchner. Es que los fiscales de la Causa Vialidad, Diego Luciani y Sergio Mola, pidieron 12 años de cárcel e inhabilitación a cargos públicos contra la vicepresidenta, quien este martes se descargó vía redes sociales. En este marco, Máximo, quien presidente el PJ Bonaerense, convocó a una reunión de urgencia en la sede partidaria de La Plata.
Según NA, el cónclave se llevará a cabo este jueves al mediodía en la sede partidaria de La Plata. El objetivo será consensuar una línea política común de respaldo a la figura de la Cristina Kirchner, acusada de los delitos de asociación ilícita y defraudación al Estado por irregularidades en la obra pública en la provincia de Santa Cruz, en favor del empresario Lázaro Báez, entre 2003 y 2015.
En las filas oficialistas se debate cuál será la fecha en que todos los sectores del peronismo, centrales obreras, movimientos sociales y fuerzas de centroizquierda afines al kirchnerismo saldrán masivamente a las calles para marchar en defensa de la vicepresidenta y en contra del “lawfare”. Mientras tanto, el líder de La Cámpora busca tomar la delantera en la discusión para empezar a organizar la resistencia a la ofensiva judicial contra su madre.
El paralelismo entre CFK y Perón
El PJ bonaerense ya había emitido un comunicado oficial en “solidaridad con la compañera vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner y expresa su repudio por la utilización de uno de los tres poderes del Estado, el Judicial, para la persecución de dirigentes políticos y sociales”. En tanto, el ministro de Justicia bonaerense y consejero del PJ bonaerense por la Octava sección electoral, Julio Alak, sostuvo: “Hay que organizarse, ya no alcanza con un Twitter”.
El posteo del funcionario bonaerense se dio antes de participar de la jura del nuevo ministro de Trabajo bonaerense, el sindicalista de la Corriente Federal de Trabajadores Walter Correa. En el Teatro Metro de La Plata, donde tuvo lugar la convocatoria, los presentes cantaron: “Si la tocan a Cristina, qué quilombo se va a armar”. Un clásico de estos días, el cántico brotó desde todo el auditorio de forma espontánea, lo que marca un clima de agitación y adrenalina en el kirchnerismo.
¿Nuevo 17 de octubre?
Fue la senadora nacional ultrakirchnerista Juliana di Tullio quien sinceró que ya se está conversando informalmente sobre la fecha de convocatoria. Una de las alternativas que surge con más fuerza es la del Día de la Lealtad, fecha de alto contenido simbólico para el peronismo porque conmemora la liberación del entonces coronel Juan Domingo Perón, en el marco de la multitudinaria y espontánea movilización obrera ocurrida el 17 de octubre de 1945.
Quienes alientan esta fecha para colmar la Plaza de Mayo y las principales arterias del centro porteño argumentan que existe un paralelismo histórico que une las circunstancias vividas por Perón. En aquel 1945, el exmandatario estaba detenido en la Isla Martín García. En tanto, a Cristina la consideran víctima de una operación del ariete judicial con sus apoyos mediáticos, políticos y económicos para asediarla, estigmatizarla ante la sociedad y, en el peor de los escenarios, meterla tras las rejas.
Qué dice el entorno de Cristina Kirchner
En el entorno de Cristina Kirchner están convencidos de que “la condena ya firmada” que el tribunal va a dar a conocer tiene motivaciones políticas y no jurídicas, en una suerte de revanchismo histórico para “disciplinar” a la clase política, y que ésta no repita la experiencia kirchnerista, a la que le adjudican haber enfrentado intereses que para el establishment no debían haberse tocado jamás.
Como sea, existe “un despertar de miles y miles de compañeros y compañeras de militantes y no tan militantes que no tienen una militancia tan orgánica pero se sienten convocados no a defender a Cristina, sino a defender al peronismo y a la democracia por esta situación que se está atravesando”, señaló el ministro bonaerense y secretario general de La Cámpora, Andrés ‘Cuervo’ Larroque.
“Por las comunicaciones que estamos teniendo con compañeros de todo el país, se irán generando encuentros, plenarios, reuniones y seguramente eso irá confluyendo en alguna cosa de mayor magnitud que no sabemos ni cuándo, ni dónde será. Pero el espíritu está latente para que se genere”, se entusiasmó el ‘Cuervo’ uno de los más acérrimos defensores de la vicepresidenta.