Este jueves, el presidente Vladimir Putin firmó un decreto para aumentar el tamaño de las fuerzas armadas de Rusia de 1,9 a 2,04 millones de efectivos, al comenzar el séptimo mes de la guerra en Ucrania. Moscú no ha revelado pérdidas en el conflicto desde sus primeras semanas, pero funcionarios occidentales y el gobierno ucraniano dicen que se cuentan por miles.
El aumento de tropas, que incluye 137.000 efectivos militares a 1,15 millones, entrará en vigor el próximo 1 de enero, según un decreto publicado en el portal legislativo del Gobierno. La última vez que Putin estableció el tamaño del Ejército ruso fue en noviembre de 2017, cuando el número de militares para combate se fijó en 1,01 millones de un total 1,9 millones, si se incluye a los no combatientes.
Rusia no ha informado cuántas bajas ha sufrido en Ucrania desde las primeras semanas de la campaña, cuando declaró que 1.351 de sus soldados habían muerto. Las estimaciones occidentales dicen que el número real podría ser al menos 10 veces mayor, mientras que Ucrania dice que ha matado o herido al menos a 45.000 soldados rusos desde que el 24 de febrero comenzó el conflicto, que Moscú califica de operación militar especial.
Kiev también ha sido reacio a publicar información sobre el número de sus soldados que han muerto en la guerra, pero el lunes el jefe de las fuerzas armadas de Ucrania anunció que casi 9.000 miembros del personal de servicio habían muerto en una rara actualización, informó Reuters.
El decreto de Putin no informó de cómo se iba a conseguir el aumento de efectivos, pero daba instrucciones al Gobierno para asignar el presupuesto correspondiente. Según un informe anual autorizado del Instituto Internacional de Estudios Estratégicos, Rusia contaba con 900.000 efectivos en activo a principios de este año y con 2 millones de reservistas que han prestado servicio en los últimos cinco años.