A algunos dirigentes les pareció acertada la decisión de Diego Luciani de pedir 12 años de prisión para Cristina Kirchner más la anulación para que ocupe cargos públicos. Otros, principalmente oficialistas, rechazaron por completo el pedido del fiscal. Sin embargo para Francisco Sánchez, diputado nacional por Neuquén, pidió «pena de muerte» para la vicepresidenta.
El legislador de Juntos por el Cambio se mostró confiado y vehemente para que se pueda restaurar la pena capital. En ese caso lo reclamó para Cristina Kirchner. El neuquino quedó totalmente disconforme con la exposición de Luciani. Del mismo modo, acusó a la exmandataria de «traición a la patria» y como consecuencia pidió su ejecución.
«12 años por robar impunemente es casi nada. El año pasado presenté un proyecto de ley para que este tipo de delitos sean considerados traición a la Patria. Merecen la pena de muerte, no una liviana prisión domiciliaria», escribió el legislador opositor en su cuenta personal de Twitter. Remarcó la particularidad del caso ya que se trató de una asociación ilícita desde el Gobierno de aquel entonces.
Sánchez profundizó un debate que parecía haber quedado muy en el pasado. Pese a eso su enojo por la presunta «plata robada» al pueblo argentino, Sánchez se siguió manteniendo en su postura: «Las penas tienen que ser ejemplares. Lamentablemente, en Argentina hace mucho que se ha abolido la pena de muerte. Considero que personas que nos afectan tan gravemente a todos, merecerían esa pena«, agregó.
«No tengo dudas de que si se comprueba la responsabilidad de Cristina Kirchner y el resto de las personas imputadas en la causa Vialidad y se los encuentra culpable de los delitos que se les haya imputado, son traidores a la Patria. Los traidores a la Patria tienen que ser tratados como lo que son, como personas que nos han vulnerado a todos. No merecen ningún tipo de consideración. 12 años es muy poco. Inhabilitación perpetua para cargos públicos es muy poco también«, sentenció.
