Los esfuerzos del Gobierno del presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, por domar la inflación con una mayor oferta en moneda extranjera podrían verse amenazados en medio de un crecimiento económico luego de años de estancamiento, explicaron analistas económicos.
Por meses, el Gobierno chavista ha centrado su política de desaceleración de los precios en la estabilidad del tipo de cambio que se cancelará con el aumento de oferta de divisas en efectivo en la banca local y la limitación en la expansión del crédito y del gasto publico
Pero en las últimas semanas, el Banco Central vendió menos dólares a través de la banca y el Gobierno incrementó su gasto, según fuentes, lo que elevó la demanda en el mercado cambiario y el tipo de cambio oficial se depreció en seis días un 21, 7%, de acuerdo con la tasa divulgada el jueves por el emisor. La brecha con el dólar no oficial se amplía.
«Es imposible pensar en la estabilidad cambiaria con el nivel de precios de Venezuela», explicó el economista de la firma local Ecoanalítica, Luis Arturo Bárcenas. «El equilibrio entre la tasa oficial y la no oficial era muy frágil porque se basaba en la inyección de divisas, y no se ha curado la falta de credibilidad del venezolano respecto al bolívar», agregó, replicó Reuters.
Maduro expresó que los actores están intentando «perturbar la recuperación económica». «Viene un grupo de inescrupulosos a disparar el dólar paralelo de manera ficticia y falsa para que vengan un grupo de comerciantes también inescrupulosos a robar al pueblo», agregó el mandatario en una alocución trasmitida por el canal estatal de televisión.
Aunque ha habido una desaceleración de los precios, la inflación interanual aún es alta ya julio fue del 137%, según las cifras del Banco Central, lo que impacta en la capacidad adquisitiva de los venezolanos. Un salario mínimo equivale a 19 dólares mensuales.
El emisor emitió el miércoles a los bancos un nuevo esquema para atender la demanda de divisas en el que las entidades notifican los requisitos de dólares de las empresas y proponen una tasa cambiaria, que las autoridades evaluarían, agregaron dos fuentes con conocimiento de la propuesta. El Banco Central no respondió inmediatamente a una petición de comentarios por parte de Reuters.
«Todos los indicadores (producción de alimentos, recaudación tributaria, entre otros) muestran un progreso en la mitad del año», dijo el primer economista Leonardo Vera, quien agregó que el comportamiento de la economía podría cambiar en los próximos meses por el estancamiento de la producción petrolera. «Las tasas de crecimiento van a verse muy disminuidas», añadió.
