Carlos Rivolo, fiscal federal, exigió que no se libere a la tercera detenida, Agustina Díaz, por los mensajes que la comprometen como encubridora del intento de magnicidio en Recoleta contra Cristina Kirchner. El funcionario judicial presentó un escrito ante la jueza María Capuchetti, pero la magistrada todavía no se expidió. Por ahora, el caso sigue en secreto de sumario, aunque ya le tomaron declaración a la reciente acusada.
Por ahora parece que el pedido de libertad no prosperará, porque para Capuchetti es considerada partícipe del atentado, según fuentes de la agencia NA. En ese marco, el fiscal considera que todavía falta recolectar más pruebas para el expediente y chequear que Agustina no haya sido participe del atentado, aunque parece que será difícil que quede libre del cargo de encubrimiento a Brenda Uliarte.
En el celular de Uliarte, la Justicia detectó mensajes de Agustina con Brenda donde le decía: «Quien no va a querer meterle un tiro a esa vieja chorra». Luego Uliarte le contaba sus deseos de matar a la vicepresidenta el 27 de agosto: «Hoy me convierto en San Martín, voy a mandar a matar a Cristina…Me re pudrí que hablen y no hagan nada. Yo si voy a hacer. Se me metió el espíritu de San Martin en el cuerpo. Pero ese día no pudieron por una cuestión operativa y Brenda le mandó otro mensaje: «Que hija de puta se metió adentro antes de que le meta el tiro».
«No me cobró lo hizo porque también está re caliente con lo que está pasando. Te juro que a esa la voy a bajar. Me tiene re podrida que ande robando y quedé impune», insistió Brenda para aclararle a Agustina que no le había pagado al que quería asesinar a Cristina. Luego el día del atentado, donde falla el disparo Fernando Sabag Montiel, Agustina le aconsejó a Brenda métodos para que no la descubran.
«Che, pero que onda que falló el tiro? No practicó antes o le falló la adrenalina del momento? ¿Vos donde estás? ¿No sería conveniente que vayas a tu casa?», comentó Agustina y Uliarte respondió: «En lo de una amiga. No boluda anda a saber si me allanan». Luego Díaz dijo: «Ya le allanaron la casa. Lpm. El tema es que le van a peritar el celular y si hay alguna evidencia de que vos sabias lo que el iba a hacer. «Tenés que deshacerte del celular y cambiar el número. Borra tu cuenta, todo». Este el último mensaje complicaría a Agustina como encubridora.