El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, aseguró que la pandemia del coronavirus «ha terminado», aunque, admitió que el país «aún tiene un problema» con la enfermedad que mató a 1,05 millones y contagió a 95,4 millones en el país del norte del continente, según las autoridades.
«Todavía tenemos un problema con el coronavirus. Todavía estamos trabajando mucho en ello, pero la pandemia ha terminado. Si te das cuenta, nadie está usando máscaras. Todo el mundo parece estar en buena forma. Y por eso creo que está cambiando», agregó el mandatario en una entrevista televisiva, replicó Télam.
Sus comentarios dan cuenta del estatus actual de gran parte de la sociedad de Estados Unidos, donde las restricciones se han eliminado mayoritariamente y los vuelos han repuntado a sus niveles prepandemia. El mandatario también abordó los bajos índices de apoyo a su Gobierno y vinculó este hecho al impacto que tuvo el coronavirus en la mente de los estadounidenses.
Sin embargo, los dichos del mandatario se produjeron apenas unas semanas después de que su administración pidiera al Congreso miles de millones de dólares en financiación para mantener los programas de pruebas y vacunación durante una potencial ola en el inminente otoño boreal.
«El impacto en la mente del pueblo estadounidense como consecuencia de la pandemia es profundo. Piensa en cómo eso lo ha cambiado todo. Las actitudes de las personas sobre sí mismas, sus familias, sobre el estado de la nación, sobre el estado de sus comunidades», aseguró.
Por último, Biden valoró la gestión del coronavirus llevada a cabo por su administración. «Hemos perdido un millón de personas por el coronavirus. Cuando asumí el cargo, cuando fui elegido, solo dos millones de personas habían sido vacunadas. Ahora tengo 220 millones», concluyó.