Durante la mañana del domingo, el presidente Alberto Fernández estuvo en una misa realizada en Luján para pedir «paz social» tras el ataque armado contra Cristina Kirchner. En Juntos por el Cambio hubo varios invitados aunque no todos los miembros del espacio político a pesar de que Miguel Ángel Pichetto, uno de los referentes del peronismo federal, recibió un llamado pero no asistió aunque la siguió de cerca.
El precandidato a presidente lanzó una serie de críticas hacia la misa a pesar de que también intentó encontrarle un punto positivo al acto. «Vi la misa por televisión. Me pareció otra muestra de esta Iglesia argentina sectaria y clasista. El arzobispo que dio la misma podría ser un militante del gobierno, lo secundaban curas pro montoneros y seguidores del Padre Mugica», afirmó.
Seguido a esto, aseguró que «no es una misa que convoque a la unidad de los argentinos» porque desde hace tiempo que ya no escuchan a la Episcopal ni al Papa Franciso hacer reflexiones acerca del país. «Eso es lo que está faltando», advirtió Miguel Ángel Pichetto en caso de que quieran transmitir un mensaje de paz general para la Argentina.
En este mismo sentido, Pichetto señaló en Radio mitre que la sociedad espera “un mensaje más profundo del hombre que ejerce el máximo poder en el Vaticano” luego del ataque a Cristina Kirchner. Además, afirmó que “parece que el Papa está enojado con los argentinos» por no hablar sobre ellos ni haber venido de visita en todo su tiempo como máxima figura católica.
El clima social
Por último, el dirigente señaló que «estamos en un tiempo extremadamente delicado. La paz social esta frágil y amenazada y somos responsables de asegurarla y cuidarla». En adhesión a ello, reconoció que sintió «que era una muy buena iniciativa» participar de este acto y pidió que «no se malinterprete este gesto» con connotaciones políticas.