La propuesta para construir un muro a lo largo de algunas partes de la frontera de Finlandia con Rusia recibió en Helsinki un amplio apoyo de los partidos con representación parlamentaria. La primera ministra Sanna Marin convocó la reunión para discutir la idea de la valla en el país de Europa, cuya construcción requeriría alrededor de cuatro años.
Después de la reunión, Marin declaró a los medios que ahora el Gobierno sacará adelante el proyecto a través de un presupuesto complementario en el otoño. El primer año de construcción costará 140 millones de euros. Finlandia comparte con Moscú una frontera terrestre de cerca de 1.300 kilómetros, la más larga de la Unión Europea, pero la valla cubriría alrededor de 300 kilómetros, informó NA.
“Se trata de poder asegurarnos de que la frontera está bien vigilada y de ser capaces de anticiparnos a lo que pueda ocurrir en ella”, afirmó Marin. El Kremlin ha advertido reiteradamente a Helsinki de que su ingreso en la OTAN tendrá graves consecuencias. Junto a Suecia, el país ha solicitado su ingreso a la Alianza Atlática.
A finales de septiembre, Finlandia aprobó el cierre de las fronteras a los turistas rusos, en plena escalada migratoria derivada de la movilización parcial anunciada por el presidente Vladimir Putin. De esta forma se sumí a las restricciones en ese sentido que ya adoptaron antes los Países Bálticos y su vecino, Polonia.
Actualmente, la frontera sólo tiene unas cuantas vallas pequeñas para impedir el cruce del ganado. La iniciativa finlandesa recuerda el muro que Donald Trump mandó construir en la frontera de los Estados Unidos con México. También otra valla que dividiría la República Dominicana de Haití.
