El presidente Vladimir Putin sostuvo el domingo que la explosión en un puente clave que une Crimea con Rusia continental fue un acto terrorista planeado por los servicios especiales de Ucrania. «No hay duda. Se trata de un acto terrorista destinado a destruir infraestructuras civiles de importancia crítica», expresó Putin.
«Esto fue ideado, realizado y ordenado por los servicios especiales ucranianos», agregó. El mandatario se reunió con Alexander Bastrykin, jefe del Comité de Investigación de Rusia, que presentó las conclusiones de una investigación sobre la explosión y el incendio del sábado en el puente, informó NA.
A la explosión del sábado en el puente sobre el estrecho de Kerch siguieron mensajes de júbilo de funcionarios ucranianos, que, sin embargo, no reivindicaron responsabilidad. Este paso es una arteria principal para el ejército ruso en el sur de Ucrania, donde controlan la mayor parte de la región de Jersón y gran parte de la región de Zaporiyia, y para el puerto de Sebastopol, donde tiene su base la flota rusa del mar Negro.
Todavía no está claro si la explosión del sábado fue un ataque deliberado, pero el daño a una estructura de tan alto perfil ocurre cuando Moscú sufrió derrotas en el campo de batalla, y podría contradecir aún más las garantías del Kremlin de que el conflicto se está desarrollando según lo revisto.
Rusia arrebató Crimea a Ucrania en 2014 y el puente de 19 kilómetros que une la región con su red de transporte fue inaugurado con bombos y platillos cuatro años después. «La situación es manejable: es desagradable, pero no fatal», sostuvo el gobernador ruso de Crimea, Sergei Aksyonov. «Por supuesto, las emociones se han disparado y hay un sano deseo de buscar venganza», agregó.