Corea del Norte disparó este viernes un misil balístico de corto alcance al mar y cientos de proyectiles de artillería cerca de la frontera con Corea del Sur, anunció el ejército de Seúl, la última actividad militar del país con armas nucleares en medio de un aumento de las tensiones.
Por su parte, Corea del Sur también lanzó aviones de combate cuando un grupo de unos 10 aviones militares norcoreanos voló cerca de su frontera fuertemente fortificada. Pyongyang disparó unas 450 rondas de artillería en «zonas de amortiguamiento marítimas» en múltiples ocasiones, dijo el Estado Mayor Conjunto del Sur (JCS).
El Consejo de Seguridad Nacional de Corea del Sur (NSC) condenó al Norte por la escalada de tensiones y calificó sus movimientos como una violación de un pacto militar bilateral de 2018 que prohíbe los «actos hostiles» en la zona fronteriza. Seúl impuso sus primeras sanciones unilaterales contra Pyongyang en casi cinco años. Puso en la lista negra a 15 personas y 16 instituciones involucradas en el desarrollo de misiles.
El JCS emitió una advertencia a Corea del Norte, instándola a detener las provocaciones y la escalada de tensión. El presidente de Corea del Sur, Yoon Suk-yeol, dijo que Pyongyang ha estado «realizando indiscriminadamente provocaciones» y prometió diseñar «contramedidas irrefutables», publicó Reuters. A su vez manifestó que su gobierno respeta los acuerdos intercoreanos y que desechar el pacto militar de 2018 depende del comportamiento de Pyongyang.
El ejército de Corea del Norte expresó que tomó «fuertes contramedidas militares» por el fuego de artillería de Corea del Sur el jueves. Seúl afirmó que fueron ejercicios militares «legales». La frecuencia sin precedentes de los lanzamientos de misiles de Corea del Norte ha generado preocupaciones de que pueda estar preparándose para reanudar las pruebas de bombas nucleares por primera vez desde 2017.