Alberto Fernández se abrió al hablar de su salud tras la gastritis erosiva que sufrió durante la cumbre del G20 en la ciudad de Bali, Indonesia. El mandatario argentino aseguró estar «bien de salud» luego del episodio y le agradeció a la vicepresidenta Cristina Kirchner por haberse comunicado con él. Además, compartió un poco del parte médico que le presentaron, al decir: «Me pidieron que pare un poco«.
“Ayer recibí el llamado de Cristina y se lo agradecí mucho», indicó Alberto Fernández en comunicación con Radio 10. Luego, dijo que «los médicos me pidieron que por favor pare un poco, así que, tuve que acotar lo que menos pude la agenda en la cumbre del G20» y confesó que su estado de salud lo «asustó» debido a los cuadros de estrés y nervios.
“Me asusté yo. Les agradezco la preocupación que tuvieron. Fue un mal momento. Tuve un problema estomacal que arrastro de hace muchos años, pero nunca se había manifestado en esa forma, de que el estómago sangre”, expresó Alberto Fernández. La descompensación se produjo mientras interactuaba con el presidente de España Pedro Sánchez, que se evidenció por una bajada de presión y excesiva sudoración.
Por último, expresó que “ya en mi vuelta haremos estudios más cuidadosos, pero la recuperación rápida es un dato tranquilizador, que lo pudimos hacer ver rápidamente”. Por la gastritis erosiva, el jefe de Estado tuvo que acortar su agenda para hacerse los estudios necesarios, acompañado solo por Santiago Cafiero, Sergio Massa y su traductor.
El encuentro de Alberto Fernández con Kristalina Georgieva
En otra parte de la entrevista, aseguró que le fue «muy bien» en la reunión con la directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Kristalina Georgieva, mientras que insistió en que la economía de Argentina «sigue creciendo» y que «hay que trabajar para bajar la inflación». “La economía en argentina sigue creciendo, tenemos que ocuparnos de la inflación, bajarla, pero tenemos que saber que estamos yendo por buen camino», indicó.