Durante la última semana, Cristina Kirchner junto a sus abogados presentó un pedido de recusación contra la jueza María Eugenia Capuchetti. Entre los argumentos de la querella está que no realizó peritajes sobre Gerardo Milman, dirigente de Juntos por el Cambio, ni se interesó en saber qué ocurrió con los datos extraviados del teléfono de Fernando Sabag Montiel, quien le gatilló dos veces el primero de septiembre.
Luego de que la Cámara Federal ratifique a la magistrada en el cargo, las medidas de investigación comenzaron nuevamente a aparecer. Tal es así que la Justicia promovió hoy una investigación penal sobre la manipulación del teléfono de Fernando Sabag Montiel luego de que el móvil haya sido formateado de fábrica y se hayan perdido casi todos los datos del interior.
Esto se impulsó luego de salir a la luz un informe de la Gendarmería Nacional en el que se detalló el recorrido que hizo el dispositivo. Dentro de la cadena de responsabilidades, la Policía Federal Argentina y la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) están involucrados en la manipulación e inutilización del aparato según difundió NA.
¿Qué paso con el teléfono de Sabag Montiel?
El teléfono de Fernando Sabag Montiel fue secuestrado la misma noche del atentado contra Cristina Kirchner. El aparato llegó al despacho de la jueza Capuchetti que ordenó la extracción de su contenido a expertos de la Policía Federal. No pudieron sacar los datos del interior, por lo que lo llevaron a la Policía de Seguridad Aeroportuaria que, supuestamente, tenía una versión más completa del programa.
En resumen, viajó del despacho de la jueza, a la PSA en un vehículo acompañado por custodia privada. Sin embargo, llegó a los laboratorios de la PSA en Ezeiza sin cadena de seguridad y en un sobre abierto, donde los técnicos dejaron constancia de ello y por eso salió a la luz la manipulación que sufrió el celular del atacante de Cristina Kirchner.