Eduardo Duhalde manifestó que la convocatoria de hoy de Cristina Kirchner necesitará de un despliegue de micros y mucho dinero para lograr un acto masivo como sucedió el 17 de noviembre de 1990, cuando más de 600.000 peronistas asistieron de manera espontanea a Laferrere para escuchar el discurso de Alberto Pierri, el expresidente de la Cámara de Diputados que presidió el puesto durante los 10 años del menemismo.
«Hoy se perdió la mística de la espontaneidad en la política. Hoy los más jóvenes y los no tanto, concurren a los eventos movidos por un cantante, por una banda de rock o por las marchas reivindicatorias de las minorías, pero desgraciadamente -y debido a la degradación que año tras año viene soportando la política- para reunir menos del 10% de aquel encuentro de 1990 se requiere de un despliegue de micros y de mucho, pero mucho dinero«, sentenció Duhalde en un escrito publicado en la agencia NA.
En ese marco, el exmandatario sostuvo que las última gran movilización espontanea fue contra la clase política en diciembre del 2001, cuando la inmensa mayoría de los argentinos se unieron para gritar a viva voz un mensaje de guerra: «Que se vayan todos”. Aquella manifestación genuina se repitió en distintas calles y veredas de todo el país.
El exgobernador de la provincia de Buenos Aires también señaló que el peronismo y en definitiva los argentinos necesitan unir esfuerzos para consensuar políticas integrales de largo plazo que permitan sostener un sendero de desarrollo en el tiempo. «Es el único camino que nos permitirá avanzar como Nación», insistió en su columna de opinión.
El acto de la vicepresidenta será la segunda actividad pública tras el intento de asesinato que sufrió el 1 de septiembre en la puerta de su domicilio en Recoleta. En el lugar ubicado en La Plata se esperan 50.000 personas y un despliegue de seguridad al estilo de los que se llevan a cabo en recitales para prevenir cualquier tipo de evento violento.