Tras una mañana y un mediodía de completo caos en la Avenida 9 de Julio, las agrupaciones y movimientos sociales decidieron levantar el acampe en el microcentro de la Ciudad de Buenos Aires. La determinación se dio luego de una reunión que mantuvieron los referentes de Unidad Piquetera, con Eduardo Belliboni (Partido Obrero) y Silvia Saravia (Barrios de Pie) a la cabeza, con funcionarios del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación.
Desde la cartera conducida por Victoria Tolosa Paz se comprometieron a presentar este viernes un nuevo cronograma para la entrega de alimentos para los comedores, mientras que Belliboni anticipó que el próximo lunes anunciará un nuevo plan de lucha. Por su parte, Saravia indicó que desde el ministerio entregarán un refuerzo “teniendo en cuenta lo que no se entregó en el mes de octubre”.
“En función de eso, esperaremos hasta mañana para ver si cumplen y nos mantendremos en estado de alerta”, agregó en declaraciones a NA. Unidad Piquetera volvió a cortar la Av. 9 de Julio este jueves tras la falta de acuerdo en la reunión del miércoles con la ministra Tolosa Paz. “El lunes vamos a hacer una evaluación de cómo vienen las distintas gestiones y definir lo que vamos a hacer”, agregó.
Asimismo, anticipó que volverán a movilizarse con seguridad el 22 de noviembre, día en que se reunirá el Consejo del Salario Mínimo, Vital y Móvil. A su turno, Belliboni remarcó las promesas incumplidas por parte del Gobierno y afirmó que se mantendrán en “estado de alerta”. “Vamos a hablar con nuestros compañeros para levantar la acción porque hemos dado un paso adelante”, asentó.
“Como personas que reclaman respuestas, cuando las respuestas empiezan a aparecer, tomamos la medida que corresponde”, argumentó el titular del Polo Obrero. Los reclamos se focalizaron en las promesas que había asumido su predecesor, Juan Zabaleta, sobre el fuerzo de las partidas alimentarias, el suministro de herramientas para las cooperativas y un bono de $ 45.000 para quienes no alcancen a cubrir la canasta básica.
Por la mañana del jueves, Belliboni había disparado contra quienes apuntaron que se trata de una problemática que solo afecta a su espacio: “A los comedores del Movimiento Evita tampoco les llega la comida, pero como sus dirigentes están sentados en sillones del Ministerio parece no molestarles tanto. Deberían estar en la calle como nosotros”, puntualizó el referente piquetero.