Un dirigente prorruso en el sur de Ucrania dijo que Moscú probablemente retirará a sus soldados de la ribera occidental del río Dniéper en Jersón. También instó a la población civil a que se retire, lo que podría indicar una retirada que sería un revés para la guerra de Rusia. Los altos cargos de Moscú guardaron silencio.
El Gobierno de Kiev y los analistas Rusia militares occidentales se utilizan cautelosos, sugiriendo que podría estar tendiendo una trampa a los soldados ucranianos. «Lo más probable es que nuestras unidades, nuestros soldados, partan hacia la orilla izquierda (oriental)», dijo Kirill Stremousov, el administrador civil adjunto de la región de Jersón.
La zona incluye la ciudad de Jersón, capital de la región del mismo nombre y única ciudad importante que Rusia capturó y ha mantenido desde su invasión en febrero. También incluye un lado de una presa a través del Dniéper que controla el suministro de agua para regar Crimea, la península que Moscú ha ocupado desde 2014.
Anteriormente, Rusia había negado que sus fuerzas estuvieran planeando retirarse de la zona. Stremousov dijo que «tenemos que tomar algunas decisiones muy difíciles ahora. Sea cual sea nuestra estrategia. Y algunas personas pueden tener miedo de reconocer las cosas», replicó Reuters.
Se especuló con la posibilidad de que Rusia se retirara realmente, después de que circularan por internet fotos en las que se vio el principal edificio administrativo de la ciudad de Jersón sin la bandera rusa en lo alto. Ucrania explicó que esas imágenes podrían ser desinformación rusa. Natalia Humeniuk, portavoz del mando militar del sur ucraniano, dijo que podría tratarse de una trampa rusa.