Pasadas las 16.00 de este viernes, comenzó el homenaje a las víctimas de la tragedia de Cromañón, ocurrida el 30 de diciembre de 2004. El epicentro de la actividad fue el Santuario montado frente al lugar donde funcionaba el boliche en el que hace 18 años, durante un recital de Callejeros, murieron 194 personas y alrededor de 1.500 resultaron heridas. Luego, el homenaje se trasladó al Obelisco porteño y allí apareció Patricio Fontanet, el exlíder de esa banda musical, quien brindó un show de unos 20 minutos, sin hacer alusión a la masacre.
Fontanet, quien ahora encabeza Don Osvaldo, recibió ovaciones por parte de los presentes al ingresar al escenario montado sobre la plaza de la República, donde cientos de personas comenzaron a hacer flamear banderas con frases alusivas a la masacre. Entre ellas se leían “La música no mata” y “Llevo a los pibes por siempre”. La mayoría de las banderas provenían de localidades del conurbano bonaerense, según Télam.
Fontanet cantó unos 20 minutos sin hacer alusión alguna a la masacre y tras presentarse con el tema “Normal”, luego cantó “Ciegos”, “O No”, “Más Allá”, “Dos Secas”, todas ellas cantadas con emotividad y efusividad por el público. Tras concluir el recital, los espectadores empezaron a cantar “A estos pibes los mato la corrupción” y “Callejeros es un sentimiento, que no puedo parar”.
La masacre de Cromañón
El 30 de diciembre de 2004, una bengala encendida en el recital de Callejeros en el boliche República Cromañón prendió fuego el techo de material inflamable y el incendio desatado en el local, al que había entrado el doble de concurrencia admitido, sumado a la imposibilidad de abandonar el lugar por la salida de emergencia que estaba bloqueada, ocasionó la muerte de 194 personas y lesiones de diferente consideración a 1.500 personas.
En 2009, la Justicia condenó al gerenciador del local Omar Chabán, al manager de la banda Diego Argañaraz, al subcomisario Carlos Díaz, al coordinador general del boliche Raúl Villarreal y a las funcionarias Fabiana Fiszbin y Ana María Fernández. Dos años después, Casación atenuó las calificaciones de incendio doloso a culposo -achacando esa misma figura a los integrantes de Callejeros-; y de incumplimiento a omisión de los deberes de funcionario público.
Finalmente, el pasado 27 de octubre, el Congreso aprobó la ley nacional 27.695 de expropiación del local de Cromañón para la creación de un sitio de memoria. En una sesión especial el Senado lo aprobó por 60 votos a favor y uno en contra. De esta manera se declaró al lugar donde funcionaba el boliche como “de utilidad pública y sujeto a expropiación” para “saldar una deuda con la sociedad”.
Los familiares manifestaron que esta aprobación es un modo de no olvidar a las víctimas del incendio y además permitió desmantelar los negocios detrás de la noche porteña. “Este es un momento histórico para el conjunto de la sociedad, representada por senadores y senadoras, que tienen la oportunidad de saldar una deuda con una generación entera. En definitiva, una deuda con la sociedad toda”, expusieron familiares frente al Congreso antes de la aprobación.